Hola amigas y amigos foreros
Les cuento mi historia amorosa, gracias para el/la lea y gracias a quien me de su opinión.
Yo llevaba 5 años con mi novio, una relación armónica en muchos sentidos, aficiones, ideas políticas, gusto por hacer música juntos, lecturas, de todo, eso sí, en la cama rollo total, parece que me acuesto con mi hermanito, siento mucho cariño, pero no había pasión. Le planteé el asunto a mi chico, le dije que debíamos buscar una solución para esto, ir a una terapia los dos o algo así, pero él nunca accedió a ello.
Esto en un principio no me preocupó, ya que, el resto de los aspectos en que congeniamos me merecía mucho la pena, sexualmente no había ninguna disfunción ni por su parte ni por la mía, simplemente esta persona por motivos que desconozco no me "revoluciona las hormonas..."
Convivimos durante 5 años, con el paso del tiempo en alguna ocasión le fui infiel, tuve alguna aventura con otros hombres que me satisfacían sexualmente, pero en otros aspectos se me quedaban muy cojos, esto me acarreó un saco de culpa terrible. Decidí entonces plantearle de nuevo la situación a mi chico, y decidí que quería vivir sola, ya que sentía que no éramos una pareja del todo completa y necesitábamos enfocar de diferente forma nuestra relación, que había que "mover" la sopa para que supiese a algo!!!
El acató mi decisión, la verdad es q hasta ahora he sido yo la que ha tomado las decisiones respecto a nosotros, ya q él se limita a eso, a acatar mi voluntad.
Hace ya 8 meses que empecé a vivir sola, al principio le echaba mucho de menos, ya que fundamentalmente lo mejor que teníamos era el día a día y la convivencia, me costó bastante adaptarme a mi nueva situación de soledad, pero al menos me sentí un poco más valiente y mas honesta.
La relación no se terminó, nos hemos seguido viendo y estando muy en contacto, pero sin saber en que íbamos a acabar, en este tiempo me fui de vacaciones con una amiga a los Andes, allí tuve tiempo para atravesar las montañas y reflexionar sobre lo que tengo y no tengo en la vida. Sentí mucha añoranza por mi chico, le extrañé como nunca, y tomé la decisión de a mi vuelta retomar la relación mas en serio y proponerme mayores metas con él, querernos, formar una familia en un ambiente de armonía, arte y creatividad, tal y como habíamos soñado tantas veces.
A mi vuelta nos vimos, todo seguía igual, el mismo cariño, la misma amistad, pero respecto al deseo ningún cambio. Aún así, recordaba la añoranza que sentí en las montañas, lo valioso e importante que él era en mi vida, y me acerqué bastante de nuevo a él, incluso me planteé que volviese a casa de nuevo, pero no quise decirslo seriamente porque no me sentía segura del todo, temía que la sensación de aburrimiento y rutina me volvieran a alcanzar.
En ese momento, una noche entré a mi sala habitual de chat, todas las noches entro un ratito a charlar con los habituales, y esa noche cuando estaba a punto de irme, zas! apareció alguien, sí, de esas veces que ocurren los encuentros, donde menos te lo esperas ¿verdad?
Conocí un chico, que para suerte o desgracia vive solo a 60 kms de mi ciudad, es decir, aqui al lado, nada de miles de kms, una distancia perfectamente salvable (horreuuuur..). Me pareció alguien con mucha sensibilidad, conectamos muy bien, y aquella noche en que nos encontramos nos quedamos charlando hasta las tantas.
Esto se volvió a repetir al día siguiente, y al otro..., intercambiamos fotografías. .etc, él tenía novia desde hacia unos tres años, pero las cosas no andaban bien entre ellos, según él era una relación muy tormentosa...
Supongo que ambos estabamos un poco decepcionados de nuestras respectivas relaciones y nuestro encuentro nos inyectó ilusión a los dos.
Al cabo de unas semanas le pedí que nos conociésemos personalmente, ya que me gusta pisar tierra y materializar las fantasías, porque si no corro el peligro de volarme, él accedió y nos conocimos.
Nos gustamos mucho, y había química sexual, algo que ante mis carencias significó bastante para mi, cada vez se hizo mas intensa nuestra relación, aunque no nos veíamos mucho porque esos 60 kms no se pueden salvar a diario y porque ambos somos personas bastante ocupadillas.
Los fines de semana él los pasaba con su novia, a mi se me hacían eternos, no podía llamarle, no podíamos chatear, y mucho menos vernos, por mi parte, cuando quedaba con mi novio cada vez me fijaba mas en las carencias de la relación que en las satisfacciones.
Un domingo regresé a casa y recibí un mail de mi enamorado anunciándome que había dejado la relación con su novia.
Bueno, por una parte me hinchó el ego y me conmovió, pero por otra parte me asusté bastante, ya que me di cuenta que las cosas iban mas en serio de lo que yo creí hasta el momento.
Su decisión me hizo plantearme dejarlo definitivamente con mi pareja y aventurarme en esta nueva relación, q prometía mucho, ya que, entre otras cosas este chico SÍ quiere ser padre, cosa que con mi novio había sido algo siempre a postergar y apenas contemplado.
Siete días después lo dejé con mi novio, le dije que había conocido a alguien especial y que quería darme la oportunidad de conocerle, que lo nuestro andaba cojo desde hacía mucho tiempo, y ya era hora de tomar una decisión., se lo tomó bastante mal, pero al cabo de las semanas sigue llamándome y enviándome mensajes al móvil como si nada hubiese ocurrido, no me pregunta nada, nos vemos a veces y estamos como siempre, como amigos y sin sexo.
Por otra parte la relación con este otro chico se ha ido dando lentamente, ya que él tiene muchos problemas en su casa, vive con sus padres y le tienen muy controladito, tiene que dar explicaciones de todo, de con quien anda, porque y como, apenas nos vemos una vez por semana, siempre con prisas, y la verdad, no me da tiempo a evaluar nada, no tengo convivencia con él, además hace semanas que no me escribe correos románticos, cuando todo antes eran atenciones, mensajes y demás...., según él lo que quiere es sacar unas oposiciones y acceder a una plaza que le reporte ingresos suficientes para salir de casa, y habla de boda y matrimonio una vez haya conseguido su objetivo.
Yo no sé que pensar, la verdad, estoy hecha un lío, ¿cómo puede alguien hablar de matrimonio con tan sólo un mes de relación? Casi sin convivir, sin experiencias que sostengan esto...
Yo he hablado con él , le he expresado mi opinión de que me gustaría verle mas, que debe ir imponiendo un poco en su casa que ya no es un niño, que casi tiene 30 años y ya es mayor para saber lo que hace con su vida. Pero él no parece tener esa intención en absoluto, por otra parte dice que tiene que estudiar, y que no puede dejar sus obligaciones, en fin chic@s. ¡Solo nos vemos una vez a la semana un rato! ....
Tengo muchas dudas, a veces creo que es un tradicionalista, que piensa en matrimonio por la Iglesia y todo eso, en el matrimonio y que se yo, pero se olvida de lo mas importante que es vivir el aquí y ahora.
Todo esto mas otras cosillas y tensiones con el trabajo me acarrearon un ataque de ansiedad, me he tratado y estoy mejor, pero tal vez alguna opinión me arrojara un poco de luz. Perdonar tan largo mensaje, pero no supe simplificar mas mi historia y gracias por leerme.
Saludos a tod@s
Dinamit