Cita con mi esteticista. hecho real
Hace años voy a depilarme al mismo sitio, en invierno no me depilo entera ya que para mi el dolor es insoportable, pero ahora que llega el verano, la cosa cambia, para ir a la piscina, o de vacaciones, o a la playa, me gusta dejarmelo completamente pelado.
Ese día salí del trabajo muy cansada, hecha polvo, para colmo habia tenido una discusión con un compañero, así que fui de mala gana a hacerme la cera. Cuando Raquel me vio entrar por la puerta con la cara que me llegaba hasta los pies me preguntó que que me pasaba y le comenté que no era un buen día.
- Venga pasa para adentro, me dijo que como era su ultima clienta, si terminaba temprano me daría un pequeño masaje para aliviar tensiones, a ver si me desestresaba un poco.
Cuando pase a la cabina, me quedé en ropa interior como siempre, y me tumbé en la camilla.
- ¿Empezamos? preguntó
-Vamos allá
Primero empezó por la cara, luego bajo a las axilas, y finalmente a las piernas, unicamente quedaba mi cosita.
- ¿Vas a hacertelo completo no?
- Si Raquel, ya en este tiempo es lo mejor.
Siempre solía hacerme un nudito en mi braguita para despejar la zona a depilar, pero ese día me preguntó, si no me importaba claro está, que me quitara las braguitas ya que se iba a hacer completo, y como había confianza de años, me habia visto mil veces antes, accedí. Apoyé mis brazos fuerte en la camilla para levantar la espalda y ella fue bajando lentamente mis braguitas.
- Verla me excitó bastante, y más aún pensar que estaba ayi solo con mi sujetador, tumbada ante ella.
- Empezó a dar tirones, vaya dolor madre mia!
Cuando casi estaba terminada, me dijo si queria algun dibujito, o una rayita, le dije que no, que me lo quitara todo, así que fué a por el ultimo pegote de cera y me lo puso, era en todo el ccentro, justo arriba de mmi clítoris, ella para ver si la cera se enfriaba, me daba pequeños golpecitos y luego daba el tirón. Yo pensaba que ayi me tenia, si ella quisiera, podría hacer de mi lo que le diera la gana.
Algún vello rebelde se había resistido a salir, asi que me dijo que esperara un momento, que iba por su pinza, salió fuera y cerró la puerta con llave, me dijo que ya era tarde y no entraría nadie más, que en cuanto terminara conmigo se marcharía. Cuando cerró la puerta empezó a quitar esos pelitos que no querian salir de mi cosita, su cabeza estaba cada vez mas cerca y yo emmpecé a excitarme de tal manera que empecé a mojarme ante sus ojos. Sus dedos rozaron mi rajita, toda mojada, yo no supe en ese momento si había sido intencionado o no.
Bueno ya hemos terminado con esto, dijo raquel, date la vuelta que voy a darte un masajito. Así lo hice, en cuanto me dí la vuelta ella me desabrochó el sujetador.
Ya por fin estaba totalmente desnuda ante sus ojos, eso si, de espaldas, pero desnuda, puso una toalla en mi culo y empezó a masajear mi espalda.
- Estas muy tensa, relajate, -como si fuera facil, pensé yo. Poco a poco fue bajando a mi cintura, solo me dió alguna vez en el culo, y se fue a los pies, de pies hacia arriba, yo estaba chorreando solo de pensar que en poco tiempo estaria masajeando mis muslos. Así fue, empezó a tocarme los muslos, me quitó la toalla y empezó también con mi culo. Yo notaba que eran mas bruscos sus movimientos, y eso me encantaba.
- Ya puedes darte la vuelta, empezamos por alante.
Cuando me di la vuelta, nos miramos por un momento, pero me recosté y ella siguio a lo suyo. Esta vez empezó piernas arriba hasta los muslos, abrió un poco mis piernas y tuvo que ver que estaba exenta de placer, porque mis jugos mojaban la sabana que habia puesto en la camilla. Se puso detrás de mi cabeza y empezó a masajearme los hombros bajando hasta el pecho, mis pechos estaban duros, y empezó a tocarlos, con sus dedos insisstía en mis pezones, yo estaba mas cachonda que nunca y se me escapó un gemido, en este momento ella bajo a mi vientre y siguio masajeando.
-¿Que tal? me preguntó, yo asintí con la cabeza. Me puso una toalla pequeña en los ojos y me dijo, ahora relajate un poco, hemos terminado. Y así lo hice, yo oi sus pasos pero no la veia, a los dos minutos volvió, yo sabia que estaba ahi pero me hice la tonta, como si estuviese extremadamente relajada.
En este momento me quitó la toalla de los ojos y me besó en la boca. Cuando abrí los ojos ayi estaba Raquel, totalmente depilada como yo. Yo no podía articular palabra, era la primera vez que veia así a Raquel y la primera vez que me encontraba en una situación así con una mujer.
- Se que lo estas deseando, dijo ella, sigue relajandote y dejame hacer mi trabajo. Raquel se puso a mi lado, me abrió las piernas y estas cayeron una a cada lado de la camilla, se agachó y con sus delicadas manos abrió mi cosita que estaba reventando de placer pensando lo que le esperaba. Llevaba esperandolo desde que me bajo las braguitas.
Empezó a pasar su lenguita por mi vagina, de abajo hacia arriba, yo me estremecía, gemía de ese placer no experimentado nunca antes. Ella me deleitaba con esa sesión majestuosa, con su lengua rozando cada parte de mi interior, entraba y salia, era maravilloso. Cuando notó que estaba a punto de correrme, paró, se puso encima mía y empezamos a besarnos. Yo quería que terminara lo que había empezado, me dejó a pocos segundos de rozar el cielo.
- Chorreabas desde que entrastes, me djo raquel, se que esto te gusta igual que a mi, en cuanto vi tus piernas mojadas empecé a mojarme yo también me dijo ella.
- Esto es una locura, contesté yo, una dulce locura. Empezó con su mano a coger toda mi rajita y a meter, 1, 2, y 3 dedos, entraban y salían, yo gritaba, nadie nos oia, nadie podia imaginarse lo que estaba pasando en ese gabinete. Mientras metía sus dedos en mi vagina, me daba mordiscos en mis pezones erectoss, y finalmente terminé teniendo posiblemente uno de los mejores orgasmos jamás experimentados.
- Yo no sabia que tenia que hacer justo despues de eso, estaba muy nerviosa, pero también muy excitada, me levanté de la camilla y la postré a ella, la abrí de piernas tal como ella habia echo conmigo, la empujé un poco hacia abajo dejando su juguetito en el extremo de la camilla, y empecé a comerme toda su rajita, no sabía si lo estaba haciendo bien o mal, pero me encantaba, succionaba sus jugos, eran deliciosos, con mis manos tocaba sus pechos, sus pezones tan duros como los mios. Era increible tenerla ayi, hacerla mia, tocar cada parte de su cuerpo, tocar toda su vagina, chuparla, mmm, sabia riquisimo. Raquel gritaba que siguiera, que ya casi estaba, era mi diosa allí postrada desnuda, abierta de piernas, y gimiendo para mí.
Terminó corriéndose, gritaba de placer.
- Cuando terminamos nos vestimos, nos daba verguenza, jaja, como imaginar que aquello habría ocurrido.
- Raquel me dijo que le habia encantado, que que tal estaba yo, le respondí que a mi también me habia encantado, entonces ella cogió su agenda y dijo, dentro de 3 semanas, a la misma hora. Cogí mi bolso, le pagué, me dijo que el masaje no me lo cobraría, nos despedimos con un apasionado beso y me marché.
Lo mejor de esta experiencia es que ha sido real, ahora espero impaciente 2 semanas que quedan para volver a depilarme, supongo que ya me depilaré entera todo el año y no espraré a verano.
Espero que os haya gustado.
Ver también
Me a
ENCANTADOOO
por favor dame tu msn