Bueno... atrevanse a leer y comenten! =d

Era un viernes por la tarde mis padres habían salido y no volverían hasta la noche, ellos todavía no sabían que yo tenía un novio.
Mi novio y yo estábamos en la sala de mi casa platicando de cosas del colegio, en un momento me levanté y fui a tomar una botella de Baileys del bar de mi casa, tome también un par de pequeñas copas y las llene de hielo.
Al llegar a la sala donde estaba previamente, me senté y comenzamos a beber juntos el comenzó a entrelazar sus brazos con los míos cuando bebía de su copa. En un momento cuando el se termino su vaso se acerco a mi y me dio un pequeño beso y después susurro en mi oreja Hoy te ves preciosa, en ese momento me voltee y vi que se estaba haciendo de noche, entonces en vez de encender las luces fui directo al centro de la sala y enchufe la falsa chimenea que nos iluminaba.
Unos pocos días antes estuve ojeando unas páginas pensando en que pronto iba a ser el día en que perdiera mi virginidad con la persona que más amaba en el mundo.
Después que me senté de nuevo en el sillón, mi novio comenzó a besarme mientras decía y describía que tan bien me veía yo a la luz de la noche, en ese momento recordé lo que había visto unos días antes y le dije Quiero intentarlo hoy el se sorprendió al principio ya que ambos éramos vírgenes pero después me mostró su sonrisa que tan excitada me ponía, él se acercó para besarme suavemente, mientras yo llevaba mis manos hacia su cara y tocaba su mejilla, él se acerco suavemente y me besó de nuevo.. Todavía su beso era suave y frágil, sentía como un calor subía y bajaba en mi cuerpo, después yo le devolví un beso pero más fuerte mientras apretaba sus labios con mis dientes, yo cerré mis ojos mientras él pasaba sus dedos por mis brazos suavemente, me besó el cuello, mi mejilla, mis párpados y yo podía sentir la humedad que dejaban sus besos. En un momento agarre su mano y la acerqué a mis pechos y un suave gemido salió de mi boca mientras sus manos pasaban por la delgada tela de mi blusa, el podía ver como se marcaban mis pezones.
El mundo parecía de ensueño en ese momento, yo me aparte de el por un momento, contemplando su cara tenuemente iluminada por la chimenea, sin decir ninguna palabra comencé a desabotonar su camisa, él me veía mientras yo lo hacía y me decía que podía sentir cada uno de mis dedos tocando su cuerpo, cuando al fin terminé mis manos exploraban cada centímetro de su cuerpo, él estaba caliente y se puso mas cuando pase mis manos por su miembro, yo iba dándole besos en todo su pecho mientras sentía un inmenso calor en mi pantalón, después el se acercó y me besó el cuello y me quitó la blusa, después me besó justo entre mis pechos mientras sus manos recorrían mi vientre internándose en lugares que nunca antes había dejado que explorara, sus dedos entraron en mi ser y un gemido se escapo de mi boca, después su lengua recorrió desde mis pechos hasta mi cuello y me mordía las orejas, en esos momentos me sentía sin aliento. Sus manos recorrieron mi espalda, mis brazos, mis hombros mientras me acercaba a él y sentía como nuestros cuerpos calientes eran presionados, piel contra piel.
En ese momento me levanté un poco para dejar que me bajara mis pantalones mientras yo bajaba los de él y veía como se los quitaba, fue como en cámara lenta.
Mi espalda se arqueó un poco cuando el se vino encima mío, sus rodillas en mi cadera, yo levante mi cabeza y besé su cuello y su barbilla, respirando duro y lamiendo sus hombros, saboreando el sudor que en él corría, después llevé mis manos a su cabello y traté de acercarlo a mi pero él se resistió, un momento después su pecho se juntó con el mío y él exploraba mi cuerpo mientras yo lo veía saborear lo que estaba haciendo, mientras el hacía su trabajo, yo dejaba salir unos suaves gemidos y cuando yo no lo pude soportar más y le rogaba que me hiciera suya, que hiciera lo que fuera pero que ya estaba más caliente de lo que podía estar, sentía que iba a estallar.
Finalmente, nos hicimos uno solo mientras yo presionaba duramente mis dedos en su espalda, lo sentía muy dentro de mi, con tanto dureza como gentileza, sentía sus músculos y su alma, me dejaba llevar por sus movimientos, mientras el me llevaba al lugar donde yo quería estar.
Yo abrí mis ojos y observé que afuera estaba lloviendo desde hace bastante rato, después me di cuenta de que ambos estábamos sudorosos, pero con cada movimiento, con cada susurro, sentía como mis problemas, mis preocupaciones se alejaban de mi vida, sentía como mi cuerpo experimentaba algo completamente nuevo, algo impresionante y cuando cada una de esas emociones terminaba, otra comenzaba.
Cuando terminábamos una ronda, descansábamos un poco, recuperándonos mientras el murmuraba cortos versos de amor (Mi novio siempre ha sido un poeta.) los cuales me hacían excitarme más y más.
Cuando ya no podíamos dar mas de nosotros me di cuenta la lluvia ya había terminado, era casi media noche y ambos sabíamos que era hora de que el se fuera.
Antes de irse murmuró:
Eres la respuesta a todas mis oraciones, eres mi sueño hecho realidad, eres la melodía mas dulce que nadie ha oído jamás, la melodía que suena en mi corazón
Y después de decir eso, me dio un beso en la frente, se vistió y salió hacia su casa, mientras yo veía su sombra desvanecerse en la noche
** Bueno, creo que quedo un poco largo , espero que les guste =)
***** por cierto... la historia es inventada