Entonces si ya sabes que no hay nada más que hacer...
...deja que se vaya.
Si realmente alguna vez te quiso, volverá y si no, seguramente encontrarás a alguien mucho más adecuado para ti.
Suena ... o quizás, demasiado obvio, pero cuando es, es y cuando no, no. Y eso se nota en cómo se desenvuelven las cosas; si todo es demasiado complicado, es mejor alejarse a menos que, de verdad, te guste mortificarte y seguir sufriendo.