Y ahora, meses después...
Hace algunos meses publiqué mis dudas sobre una relación de pareja con alguien mucho mayor que yo. Pues bien, desde julio de este año, decidí vivir con él. Es algo muy difícil para mi, estoy profundamente enamorada de mi ex jefe, ahora. Pero sí, la diferencia de edad es enorme, yo 26 y él... 53... créanme que dudé mucho esta decisión, y no me arrepiento, pero es algo muy difícil de sostener. El hecho de tener profesiones iguales nos ayuda mucho, nos entendemos en el trabajo, nos apoyamos y a veces trabajamos juntos, ambos médicos, pues, en ese sentido, nos complementamos. Tenemos una casa pequeña, y ambos hemos puesto de nuestros bolsillos para "equiparla" y mantenerla, aún le falta muchísimo, pero ahí vamos, ya que yo no quiero que él me mantenga. Es agradable para mí una persona como él, es excelente compañero sentimental y laboral, me cuida, me protege y me alienta mucho, me apoya y se preocupa por ambos. Pero no todo es bonito, ¿saben?
Nuestros amigos no coinciden mucho, ni en edad ni gustos, y, aunque él sale solo y a mi me deja salir sola, es molesta tanta burla de ellos, a veces muy subida de tono, y al punto de hacer llorar, juzgar, decirme a mi que sólo quiero su plaza, y a él que no me quiere, sólo necesita enfermera de 24 horas. Convivir con sus hijos es otro boleto, a pesar de ser viudo él, nunca te aceptan tal cual, y cuesta mucho abrirme a su hija para conversar... tiene justo mi edad, y verla a veces me provoca cierta culpa, como pensar si estoy haciendo algo mal, aunque sea ella quien mejor me acepta, saliendo incluso de compras conmigo, lo cual, ya es ganancia. Los celos son muchos, viniendo de él, ya no me pinto el cabello, ni me maquilo mucho, dejé de usar escotes y minifaldas, con tal de estar más tranquilos, porque no me gusta que los chicos de mi edad le pregunten si soy su hija, y menos que lo insulten cuando les dice quién soy. Los vecinos donde vivimos nos critican, incluso nos llegaron a decir con una carta por debajo de la puerta que su fraccionamiento es de personas decentes, y que les gustaría mucho que siguiera siendo así. Las señoras de las tiendas me niega vender cosas, y tengo que esperarlo a él para ir a un supermercado. Y, si nos ven juntos en el súper, no podemos abrazarnos siquiera, o un beso pequeño, porque "hay normas de conducta". Mi madre no lo quiere mucho que digamos, pero me dice que si es mi decisión y estoy feliz, adelante. El resto de la familia mía me han dejado de hablar, lo cual me entristece muchísimo. Y la gente que me choca que me diga "sácale un carro, quítale la casa, que te de una tarjeta de crédito". Y los que le dicen a él "engórdala, embarázala, o enciérrala, te va a dejar por uno mejor y de su edad" A veces hacen sentir pésimo, yo no le he pedido nuca tarjeta, mi trabajo es muy bien remunerado, ni auto, y las casas que tiene son de sus hijos, es suyo, siempre suyo, no le quitaría nunca el patrimonio a sus hijos. Nuestro pequeño hogar lo estamos pagando entre los dos, y aun así dicen que yo lo estafo. Me ha propuesto matrimonio enfrente de sus hijos, y su hija mayor simplemente me dijo: "sólo haz feliz a mi papá, si él es feliz, y tú también, adelante, así es la vida". Lo quiero como no tienen idea, y me encanta sentirme protegida con él, pero les cuento esto, porque sé que hay personitas en mi situación. Y es que convivir con alguien tan mayor trae muchos sacrificios, y muchas renuncias, cambias mucho de ti, y aprendes a moderarte, maduras y creces mucho, pero casi siempre, en soledad. Al menos en mi caso, yo no sé si casarme con él, lo amo demasiado, pero a veces la carga es mucha, el precio a pagar es altísimo y la gente te juzga, limita y condena. Aún lo pienso mucho, no quier seguir perdiendo todo por alguien, que, aunque me ama, y yo amo, no nos entiende la gente...es muy difícil vivir con alguien mayor... muy costoso 
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