Foro / Pareja

Un verdadero sueño

Última respuesta: 28 de enero de 2009 a las 7:20
S
sergii_7880503
28/1/09 a las 6:24

Bueno, esta es uno de los varios encuentros que tuve con una amiga del colegio, si bien nos manteníamos en contacto, no nos frecuentábamos muy a menudo, pero en un período de nuestras vidas, le serví de apoyo, dado sus problemas personales, que no vienen ser contados.
Bueno, con esos encuentros, se despertaba un poco la relación que mantuvimos en nuestra más tierna juventud, cerca de los 15 años, la época del despertar de los deseos y las pasiones.
Ella siempre fue delgada, flaca podría decirse, pasaba por algunos períodos en que ganaba peso y sus formas ganaban en generosidad, especialmente sus bellos senos, blancos redondos y proporcionalmente grandes para su frágil figura, unos senos exquisitos, de unos pezones rosados y pequeñitos, muy altivos, un verdadero placer para ver , tocar y besar, tiene un trasero no muy ancha, redondo de duras y blancas nalgas, piernas delgadas y largas, y su vagina luce un vello púbico natural, sin rebajar y sin ser muy abundante.
Durante este periodo de encuentros y desencuentros posterior a nuestra salida del colegio, habíamos tenido algunas escaramuzas sexuales, tocaciones, sexo oral, y algún pequeño encuentro netamente sexual, nos conocíamos, nos disfrutábamos, y sabíamos que nos deseábamos con intensidad y que a la menor insinuación arderíamos como el pasto seco en una caluroso día de verano.
El caso es que un día mientras yo me encontraba en mi oficina, soo, realizando los procesos de un cierre de mes, suena mi teléfono, era ella, indicándome que se encontraba sola en su trabajo, trabaja en una repartición pública, era un edificio, en donde no quedaba nadie, y por ser personal de confianza y necesitar terminar una labor importante, le habían facilitado las llaves; me pidió que la fuera a ver, yo le indique que me diera unos minutos, nuestros trabajos se encontraban a no mas de 300 metros, fui corriendo poco menos, la encontré esperándome en la puerta, me miró y sonrió, la miré y sonreí, sabíamos lo que sucedería , lo queríamos. Subimos a su oficina, que era un lugar con varios escritorios, no era privada, comenzamos a besarnos, acariciarnos y desvestirnos, me pidió que parara que fuéramos a una oficina más privada, ocupamos la de su jefe, terminé de desvestirla, ante mi quedó completamente desnuda, delgada, de blanca piel, sus senos me pedían ser tocados, besados, mordisqueados, mis manos recorrieron su figura, toqué toda su piel, todas sus formas, mis manos sentían su deseo, su estremecimiento, me deseaba, explotaba en deseos por mí, de su boca sólo emanaban pequeños suspiros, quejidos y sonidos guturales de pasión, de deseos, de ansias de ser poseída, cuando reaccionó me acarició y besó muy tiernamente, y con sus ojos me pidió que le hiciera el amor. Se recostó en el escritorio, haciendo a un lado los objetos ahí dispuestos, se encontraba absolutamente excitada y de su vagina emanaba ese olor a mujer y deseo, me enloquecía, mi pene se encontraba en su máximo, también la deseaba, la necesitaba, necesitaba hundirse en esas cálidas y húmedas profundidades, ansiaba apagar el fuego encendido por el deseo, me pidió que la penetrara, lo cual hice sin dudarlo, muy, pero muy suave, así le hice el amor durante unos minutos, a lo que ella me comentó que nunca se lo habían hecho tan delicadamente, que me deseaba desde hace mucho, pero mucho tiempo, y que nunca pensó poder realizarlo. Nos dimos cuenta que sobre el escritorio era algo incómodo, por lo cual nos echamos al suelo, una alfombra rasa nos sirvió de cama, me acomodé y ella me pidió ponerse encima, accedí, la dejé cabalgarme largo rato, ella gemía se retorcía de placer, suspiraba, gritaba me decía que me deseaba, que me necesitaba, la tomé de la cintura, me puse de pie con ella colgada a mi cuello, con sus piernas rodeando mis caderas, mi pene hundido en su vagina, la acomodé en la alfombra, mi ritmo fue en aumento, hasta entrar en un ritmo casi salvaje, frenético; la había deseado durante tanto tiempo que tenerla bajo mi cuerpo era un sueño realizado. Ella me decía al oído que también siempre había deseado ser mi mujer, que después de casi quince años, y tantas cosas transcurridas en nuestras vidas, por fin la hacia mía, que no parase, que siguiera y siguiera.
Ella evidenciaba su deseo, gemía, daba pequeños gritos, me enterraba sus uñas en la espalda, ponía sus ojos en blanco mientras suspiraba en una forma tan excitante que no podía mas que seguir penetrándola, era una escena de absoluta lujuria, nuestros cuerpos enlazados en un baile de pasión desenfrenada, nuestras manos se apoderaban de todos nuestros espacios, nuestros labios se los disputaban, éramos dos anímales salvajes, sedientos de pasión. Llegó el momento de sentir que nuestros cuerpos no daban mas de placer, y sabíamos que se aproximaba nuestro momento de tocar el cielo, de sentir el placer absoluto. Ella acabó en un orgasmo profundo y prolongado, su cuerpo daba pequeños tiritones, gemía fuertemente, su respiración era agitada y entrecortada, me besaba, y acariciaba, al ver tan bello espectáculo ante mis ojos y con toda la excitación que me provocó, eyaculé con todas mis fuerzas, como pocas veces lo había logrado hacer, llenando sus entrañas de mi deseo y pasión, la mezcla de nuestros fluidos corría por sus piernas, llegando a las mías. Ella volvía a decirme que era un sueño, que me deseaba, que quisiera ser mi mujer, nos quedamos abrazados un rato, desnudos, sudados y completamente extasiados.
Nos reincorporamos, nos limpiamos, organizamos todo nuevamente, no debíamos dejar huellas, nos besamos por un rato, pero lamentablemente tuvimos que separarnos, yo volver a mi trabajo y ella a su casa. Realmente hacer el amor con ella fue un verdadero sueño.

Ver también

S
sergii_7880503
28/1/09 a las 7:20

Solo relatos
Intentemos volver a hacer de este foro, un for de solo realtos, dentro de la pagina, hay foros y temas para avisos, legue, y cuanta cosa se nos ocurra, aca escribamos y leamos historias y fantasias para estimularnos.
lelito1169@hotmail.com

Ultimas conversaciones
No te pierdas ni uno solo de nuestros tableros en Pinterest
pinterest
ISDIN Si-Nails

ISDIN Si-Nails

Compartir