Suelo tener sueños húmedos, pero nunca había tenido uno durante la siesta de las tardes...
Soñé que vivía sola y había tenido charlas en web sobre sexo casual. Estaba soltera y quería sexo sin compromiso, y finalmente encontré a un hombre que quería sexo, pero sexo duro y me dio curiosidad, charlamos, y nos pusimos de acuerdo para vernos. Llego en la noche como 30min después que llegue del trabajo, me saludo, me dijo que le gustaba mi casa y nos sentamos a tomar una copa, pasados unos 15min de copa y charla, me besó y me dijo que estaba loco por saber que había detrás del vestido, como era alto, se me dificultaba un poco así que me cargo por las nalgas y me beso intensamente, los labios, el cuello luego me bajo y me llevo a la cama cargándome de espaldas con el trasero descubierto, le indique donde quedaba mi cuarto y vio un espejo en el cual me reflejo e inicio tocándome las nalgas presionando justo en mi ano... me bajo a la cama, quito la panty empezó a haberme sexo oral fuertemente, pensé que me volvería loca y que acabaría en 2min, luego se quito la ropa, y que cuerpo, increíble; un cuerpazo definido y bien dotado. me volteo y me quito el vestido.
No me dejaba hacer nada, todo lo hacia el con su boca, mordía, lamia, besaba y rasguñaba fuerte en todas partes, me puso de perrito y me dio muchas nalgadas, lamió en esa parte y luego empezó a penetrarme muy fuerte, juro que sentí que me traspasaría, dejo mis nalgas rojas y no me importaba, yo sólo quería más y más, su miembro era grueso y largo, me sorprendía que esa cosa tan grande me estuviese penetrando, estaba bastante satisfecha cada vez que lo hacia, no acabó aun, me tomo del cabello y me puso a hacerle sexo oral y ahí si pensé que me ahogaría, no sé como todo su pene entro a mi boca, pero trate de hacerlo lo mejor que podía, no estuvimos mucho tiempo cuando acostó y me tomo de las piernas, las alzo para penetrarme mientras me tomaba fuerte de los senos y los pellizcaba, era tan intenso que era imposible no moverme, pero me obligaba a mantenerme quieta, tomaba fuerte mis manos y me dejaba inmovilizada, le gustaba tener el control de todo, mientras más gemía mas duro me penetraba, cuando finalmente iba a acabar saco su pene y echo todo su semen en mi abdomen y yo estaba literalmente derramándome, había llegado al orgasmo unas 2 veces, creo que sólo en sueños podría acabar tanto en la primera sesión, fue increíble.
El se vestía y me luego me ayudo a levantarme, me dijo que le encaba mi cuerpo y que me había portado bien, le dije que lo disfrute y me dijo que lo sabia y finalmente se fue y yo me desperté.