El plan era el siguiente, tenía que ir a un hotel del centro para reunirme con un cliente importante y convencerle para que firmara un contrato.
Usando todas las armas que pueda, yo quería lo que él y subí hasta la planta, delante de la habitación, me subí un poco la falda y me solté un botón de la camisa respire hondo y toque la puerta.
Cuando se abrió ante mí apareció una mujer de unos cuarenta años en albornoz, uy perdón le dije buscaba al señor Martínez, soy Esther, la secretaría de Jorge preguntó, si respondí, pasa yo soy la señora Martínez.Entre en la habitación y me senté en la cama ella sonriendo me dijo cuántos años tienes, pareces muy joven, veinte respondí