Tu segunda vida empieza cuando te das cuenta de que solo tienes una

Buenas
Después de darle muchas vueltas al fin me he decidido. 
​Llevo 16 años con mi pareja, tenemos dos niñas (7 y 4 años) y me estoy planteando la separación. Hace años que soy consciente de que la cosa no va bien pero, por pena, por costumbre, por las niñas y «porque esto no me puede estar pasando a mí» he tratado de disimular. Lo he debido hacer bien pues para todo el mundo somos la familia perfecta, incluso para él. Durante todo este tiempo no me he ocupado de otra cosa que de ser buena mujer y mejor madre, por supuesto trabajadora dentro y fuera de casa pero ahora, resulta que todas las quejas que he tenido durante años pq él me ayudaba lo mínimo, parece ser que son invención mía. No quiero criticarle como he dicho es un buen hombre, con buenos valores pero quizás demasiado convencional. De esto me estoy dando cuenta ahora una vez que expuesto el tema veo que no es capaz de asimilarlo. Ahora también resulta que se ha levantado todas las noches a dar biberones ( no lo hizo nunca) y que no ha perdido años jugando a la play. Parece ser que esa es mi visión de la relación. Me esfuerzo por valorar lo que tengo y ser felíz con ello pero, cada vez lo soy menos. Tengo carencias que no he querido ver y que me están pasando factura, y que cara!!! No es cariñoso, ni romántico, ni detallista pero según él no me falta nada. Y tiene razón, excepto pq me faltan ilusión y ganas. 
Ya se lo he comentado y dice que él está como el primer día. Claaaarooooo, si aquí la que ha llevado todo a cuestas he sido yo, pero no, yo he hecho las cosas pq me ha dado la gana y es verdad hasta cierto punto. Cuando empiezas una relación lo das todo y eso hice (error) encargarme de todo hasta casi convertirme en su madre. Cuando tienes hijos lo das todo (error) también tienen un padre y se puede encargar perfectamente. Solo se encarga de las cosas cuando yo trabajo 24 horas (3 o 4 veces al mes) de resto tenemos el mismo horario de 8 a 3 ya que trabajamos juntos, factor importante pues es como si llevaras la casa encima y toda tu vida se basara en lo mismo. Sé que tengo mucha culpa pq debí delegar más pero esas cosas de madre...bueno, que imaginaos el concepto que mis chicas tienen de la familia que la peque cuando estoy me 24h me dice: mami, estamos «solos» (padre incluído), y ya me estoy empezando a agobiar pues hasta me pide que deje preparada la ropa de las niñas para el cole el día siguiente, y que les doy de cena, y que si hoy les toca lavarse el pelo...ufffffff
Es cierto que me gustan las cosas de una forma determinada y claro para él de perlas. 
Pero sabéis??? No soy tan perfecta. De hecho soy lo peor del mundo o así me siento. Por cosas de la vida y por cosas de mi relación que debí solucionar hace tiempo, me encuentro en una situación bastante jodida. Me he enamorado de otro hombre. Y ahora, que mis sentimientos van en otra dirección me doy cuenta de que no puedo ni quiero seguir así. Pensaba que podía estar así toda la vida, sacrificar mi felicidad por la de mi familia y que nadie se enterara de que era una infeliz, pero ahora que alguien más no me parece justo para nadie. No puedo negarle a mi marido la oportunidad de ser felíz con alguien que le quiera y le valore como se merece, ni yo tampoco quiero prescindir de ello. Pero pienso en mis hijas y en como voy a romper su mundo, pero también pienso que manteniéndome en esta situación las enseño a conformarse con lo que hay en vez de luchar por su felicidad. También pienso en él, tiene a su familia lejos y las amistades justas pues como yo, siempre se ha dedicado a estar en casa, con sus «quehaceres» pero en casa. Supongo que también influye la forma en la que le han criado, tan convencional como he mencionado, con una familia perfecta en la que se huele la hipocresía y la resignación en cada esquina. Y yo no quiero vivir así, haciendo las cosas pq están bien y no, pq me apetezcan. 
He de decir que siempre nos hemos llevado bien, cada uno a puesto de su parte y hasta el día de hoy nuestras hijas no saben lo que es ver una discusión en casa pero, lamentablemente entre nosotros tampoco ven amor. Yo cada vez estoy más distante pues últimamente no me apetece nada, ni cocinar, ni limpiar ni nada de nada y me temo que voy cayendo en una depresión por no ser capaz de tomar una determinación. Estoy un poco harta de todo pq todo le viene mal, si quiero apuntarme al gimnasio, si quiero salir a tomarme algo con mis amigas, ahora que muestro interés por otras cosas le molesta y en vez e animarme a dejar de llevar la vida de abuela que llevo, me dice que a ver si haciendo tonterías encuentro lo que busco. Le  molesta que sea capaz de divertirme sin él. Y lo siento pero sí, lo hago y no veo nada de malo en socializar un poco. Tengo la sensación de que todo lo que he hecho durante estos años no tiene recompensa alguna y en vez de agradecerme lo que hecho, me recrimina lo que ya me he cansado de hacer. A veces tengo la sensación de que he vivido sometida y no me he dado cuenta pq he actuado con amor y devoción a mi familia. Cada vez lo tengo más claro pero, siempre surge algo. Si no es una cosa es otra y entre excusa y excusa, el tiempo va pasando y la agonía se prolonga irremediablemente. Todo lo pago con las niñas, mis malos humores por la frustración que siento y me duele tanto...pues no puedo darles lo mejor de mí ni disfrutar de ellas como nos merecemos. He llegado a la conclusión de que unos padres que no son felices, no pueden criar hijos felices.
Me da tanto miedo equivocarme y solo conseguir hacerles daño...
Me queda mucho por decir, esto es por encima para que os hagáis una idea jajaja
Gracias

Por tu escrito, tu detonante fue el haberte enamorado de otro y ahora todo te parece nefasto,porque ves cosas en el otro que quizás tu marido no tiene o porque estás cansada de la vida que llevas.
Hay cosas que suceden porque somos demasiados permisivos en el matrimonio y todo explota con una acción,pero nos damos cuenta demasiado tarde.
No es fácil una separación cuando hay hijos de por medio,siempre existe el miedo a que todo salga mal,pero pienso que también estar encerrados en una relación que está muerta no vale la pena.
Siempre digo que hay que tomar decisiones que nos lleven a vivir mejor,porque la vida es corta y no vale la pena sufrir.