Buenas, mi novio (ex) y yo tenemos 22 años y hemos roto. Hoy me he expresado sobre cómo me he sentido a raiz de que él, por un problema personal, haya estado más distante conmigo, y le he reconocido que no soy feliz, que me rayo muchísimo, que somos muy diferentes y que aunque nos queremos, no nos entendemos como quisiésemos. Al final ha sido él quien ha dado el paso y me ha dolido muchísimo, porque la verdad que soy una persona con mucha esperanza y me encanta intentar todo por amor, pero internamente tengo la sensación de que es lo mejor para mí, aunque me siento fatal y no puedo evitar pensar en cómo le voy a echar de menos y las cosas positivas.
Somos distintos en el sentido de que soy super expresiva, él no; muy cariñosa, él no. Procuro solucionar las cosas sobre la marcha o le doy mucho valor a tener conversaciones, él se agobia,etc. Al final, nuestro día a día se convierte en un bucle de rayadas, de no entender por qué el otro ha actuado de determinada forma,etc. Y ya lo hemos intentado muchas veces. No es la primera vez que tenemos un desacuerdo y llegamos a esta conclusión, y ya lo dejamos y lo volvimos a intentar porque después de un mes, nos echábamos muchísimo de menos, pero el día a día acaba siendo el mismo.
He leido mucho sobre que si se quiere, se puede, pero de verdad ambos nos queremos y hemos hecho por ceder, tratar de entender al otro, pero es que somos distintos, y yo conmigo misma acabo siendo poco sana, le doy muchas vueltas a las cosas que no entiendo porque actuamos diferente, acabo con ansiedad, magnificando las circunstancias que para él no tienen importancia, etc. Y por supuesto me cansa, porque además intento hacer las cosas perfectas y parece que nunca es suficiente, pero él siente lo mismo. Y aún así, no puedo evitar sentirme culpable porque lo hayamos dejado, odio sentir que nos queremos y que no se puede, odio echarle de menos y no querer perderle ni como persona, y más odio sentir cierta dependencia por estar con él.
Nos ha costado tanto despedirnos, y más sabiendo que lo hemos intentado, y creo que es una decisión de verdad beneficiosa para ambos, porque no nos hacemos felices aunque le ponemos ganas, pero me encuentro muy débil y no sé cómo reafirmarme en lo que es mejor para mí.
Gracias.
