Hola!
Os voy a contar el motivo por el que me he pasado la noche en vela.
Ayer estuve con mi novia, con la que llevo poco más de un año.
La verdad es que ahora mismo no estamos pasando por el mejor momento, pero seguimos viéndonos, besándonos y teniendo relaciones sexuales. Aunque si que es cierto que tenemos una crisis de confianza.
La cosa empieza cuando a la hora de irnos a dormir le empiezo a hacer un masaje. Me encanta darle masajes y recorrer su preciosa espalda con mis manos.
Al cabo de un rato, y estando ella más quieta que un palo, empecé a bajar la mano para ver que pasaba.
Mientras la tocaba, podía observar como cada vez estaba más húmeda, y en uno de estos momentos me dijo "Me encanta cuando me tocas así". Seguí acariciándola y masajeandola. Ella se quito la camiseta y yo le quite el pantalón.
Cada vez estaba más y más mojada y por ende, yo cada vez más y más cachondo.
Hasta el momento en que decidí penetrarla.
Estaba tan lubricada que no supuso ningún problema y la verdad es que no se quejo en ningún momento. Yo seguí y pensaba que, por culpa de no estar bien, mi novia no estaba disfrutando tanto como otras veces y al irle a dar un beso, como me ha salido un herpes labial alucinante me giró la cara, pero como ya lo había echo igual al principio de la relación cuando también tenia esta infección en la boca, pues no le dí más importancia.
Al acabar y susurrarle al oído, toda la situación cambió. Se giró indignada y me dijo: "Por una vez pensaba que no estabas siendo egoísta y que no ibas a pensar solo en ti. Yo nunca te he pedido que me hicieses el amor. Espero que por lo menos, ahora, me dejes dormir."
No me he sentido más perdido en mi vida. Siento un vacío emocional enorme. Siente que la he forzado. Y yo jamás haría una cosa así. Se lo he repetido una y otra vez: "De verdad, siempre me has dicho que una de las cosas que más te gusta de mi es que a la mínima que me dices que no, paro inmediatamente. ¿Porque no me has dicho nada?"
Me respondió que para ella es más fácil no decir nada para no llevarse una decepción aún más grande porqué nunca sabe como la gente va a reaccionar. Y que si no me ha dicho nada es porque hay una crisis de confianza.
Me siento hundido.
Perdido.
Jamás he pretendido que alguien se sienta así.
No se que hacer.
Intenté estar con ella, a su lado, pero me echaba así que después de divagar como alma en pena por la casa decidí marcharme.
Acto seguido decidí volver porqué pensé que había tomado una decisión precipitada yéndome y que si se sentía así lo único que podía hacer era quedarme a su lado toda la noche haciéndole compañía. Pero ya no quiso levantarse de la cama para abrirme la puerta.
Estoy hecho polvo.
¿Algún consejo? Lo necesito.
Gracias
PD: Al principio de la relación me comento que tenía un trauma con este tema pero que no se atrevía a contármelo. Es una de las razones por las que siempre he ido con tanto cuidado.