Relaciones tóxicas
Las relaciones tóxicas son un gran problema, ¿quién no tiene un familiar o un amigo que esta totalmente inmerso en una relación que ni le conviene ni le hace feliz y a la que todos ven poco futuro? ¿El problema?, que la otra persona no lo ve y no hay manera de hacérselo ver. Esto es muy frecuente y de hecho es probable que nos pase a nosotros mismos, son estas relaciones de las que al salir decimos: Menos mal que al final salí y lo he superado! (cosa que solo se suele ver una vez fuera). Paradójicamente las relaciones tóxicas son las relaciones de las que más cuesta salir.
Existen algunas señales que nos pueden dar señas que la relación es tóxica y que por lo tanto si ves alguna de estos puntos en tu relación lo mejor es que hagas una valoración real de lo que esta sucediendo, sin embargo la relación es de dos y si no encuentras interes en un cambio lo mejor es que termines con ese círculo y sigas con tu vida. Estas señales son<.
1. La relación en la que solo esta a cargo una persona: A veces es fácil involucrarnos con una persona que tome el control de las cosas, puede parecer fácil y cómodo que cojan las riendas de nuestra vida, puede que notemos menos presión así. El problema es que esto no es opcional, es decir si tu le das las riendas de tu vida a otra persona, lo más probable es que pierdas el derecho a opinar sobre que hace con ellas. Cuando quieras recuperar el control será muy difícil y la relación empeorará. En estos casos la persona pierde autonomía, independencia, autoestima y autoconfianza.
2. La idea que la pareja debe tener la función de "completarte" o "llenarte": En este punto nadie debe completarte, porque ya eres una persona completa, debes sentirte primero satisfecha contigo misma para luego llevarlo a una relación y nunca al revés. Suelen ser relaciones en las que luego no se toleran separaciones temporales ni estar solos. No es la responsabilidad de nuestra pareja rellenar esos vacíos existenciales, es un trabajo personal de cada uno. Si no estas bien contigo mismo eso se verá reflejado negativamente en la relación. ¿El mayor problema? Suelen llevar a una acumulación de resentimiento, aunque hayamos sido nosotros que hayamos decidido valorar las necesidades del otro por encima de las nuestras, luego eso quema.
3. Relaciones en las que el pasado se utiliza para justificar el presente: Si estas en una relación en la que continuamente se te culpa por el pasado, la relación es tóxica. Si ambos lo hacen la relación se convierte en una batalla por ver quien la “cagó” más y por lo tanto quien debe disculparse.
4. Las relaciones basadas en mentiras continuas: En las relaciones una omisión es como una mentira, las relaciones se basan en la confianza, abrirse a la otra persona y conocerse mutuamente. Ocultar información relevante solo debilitará la relación. Es cierto que se puede reparar la falta de confianza pero esto es muy difícil y requerirá del esfuerzo de ambas partes. De todas formas, al final la verdad siempre se sabe. La persona nos mentirá hasta que consiga que esa mentira se convierta en nuestra realidad, no debemos entrar al juego, si descubres una mentira, confróntala.
5. Relaciones sin perdón no es relación: Nadie es perfecto, pero también mucho cuidado con lo que vas a personar y sobre todo si ese perdón se convierte en algo continuo, perdonar es dejar el error en el pasado, pero con el compromiso de que no se volverá una costumbre. Debe existir un compromiso de reparar esa confianza.
6. Relaciones en las que la comunicación es agresivo-pasivo: La comunicación de pareje debe ser asertiva, no debe haber verdades a medias o indirectas, no se debe caer en la agresión verbal para llamar la atención o disminuir a la otra persona, el respeto aún cuando no pensemos igual es fundamental para que la relación no se vuelva tóxica.
7. Relaciones gobernadas por el chantaje emocional: Esto se refiere a aplicar un castigo emocional cuando la otra persona no hace exactamente lo que queremos. Al final la otra persona accede a comportarse de otra manera a causa del chantaje. Se soluciona como en el punto anterior con una mejor comunicación. Los sentimientos y emociones se pueden comunicar pero de una manera sana y sincera sin atacar a la otra.
Existen muchos tipos de relaciones tóxicas, la felicidad es una desición y la vida es muy corta para perder el tiempo con la persona equivocada, así que al final depende mucho de cada quién el camino que desee para si mismo, así que mucho ojo si ves alguna de estas señales antes de formalizar una relación.
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Las relaciones tóxicas son un gran problema, ¿quién no tiene un familiar o un amigo que esta totalmente inmerso en una relación que ni le conviene ni le hace feliz y a la que todos ven poco futuro? ¿El problema?, que la otra persona no lo ve y no hay manera de hacérselo ver. Esto es muy frecuente y de hecho es probable que nos pase a nosotros mismos, son estas relaciones de las que al salir decimos: Menos mal que al final salí y lo he superado! (cosa que solo se suele ver una vez fuera). Paradójicamente las relaciones tóxicas son las relaciones de las que más cuesta salir.
Existen algunas señales que nos pueden dar señas que la relación es tóxica y que por lo tanto si ves alguna de estos puntos en tu relación lo mejor es que hagas una valoración real de lo que esta sucediendo, sin embargo la relación es de dos y si no encuentras interes en un cambio lo mejor es que termines con ese círculo y sigas con tu vida. Estas señales son<.
1. La relación en la que solo esta a cargo una persona: A veces es fácil involucrarnos con una persona que tome el control de las cosas, puede parecer fácil y cómodo que cojan las riendas de nuestra vida, puede que notemos menos presión así. El problema es que esto no es opcional, es decir si tu le das las riendas de tu vida a otra persona, lo más probable es que pierdas el derecho a opinar sobre que hace con ellas. Cuando quieras recuperar el control será muy difícil y la relación empeorará. En estos casos la persona pierde autonomía, independencia, autoestima y autoconfianza.
2. La idea que la pareja debe tener la función de "completarte" o "llenarte": En este punto nadie debe completarte, porque ya eres una persona completa, debes sentirte primero satisfecha contigo misma para luego llevarlo a una relación y nunca al revés. Suelen ser relaciones en las que luego no se toleran separaciones temporales ni estar solos. No es la responsabilidad de nuestra pareja rellenar esos vacíos existenciales, es un trabajo personal de cada uno. Si no estas bien contigo mismo eso se verá reflejado negativamente en la relación. ¿El mayor problema? Suelen llevar a una acumulación de resentimiento, aunque hayamos sido nosotros que hayamos decidido valorar las necesidades del otro por encima de las nuestras, luego eso quema.
3. Relaciones en las que el pasado se utiliza para justificar el presente: Si estas en una relación en la que continuamente se te culpa por el pasado, la relación es tóxica. Si ambos lo hacen la relación se convierte en una batalla por ver quien la “cagó” más y por lo tanto quien debe disculparse.
4. Las relaciones basadas en mentiras continuas: En las relaciones una omisión es como una mentira, las relaciones se basan en la confianza, abrirse a la otra persona y conocerse mutuamente. Ocultar información relevante solo debilitará la relación. Es cierto que se puede reparar la falta de confianza pero esto es muy difícil y requerirá del esfuerzo de ambas partes. De todas formas, al final la verdad siempre se sabe. La persona nos mentirá hasta que consiga que esa mentira se convierta en nuestra realidad, no debemos entrar al juego, si descubres una mentira, confróntala.
5. Relaciones sin perdón no es relación: Nadie es perfecto, pero también mucho cuidado con lo que vas a personar y sobre todo si ese perdón se convierte en algo continuo, perdonar es dejar el error en el pasado, pero con el compromiso de que no se volverá una costumbre. Debe existir un compromiso de reparar esa confianza.
6. Relaciones en las que la comunicación es agresivo-pasivo: La comunicación de pareje debe ser asertiva, no debe haber verdades a medias o indirectas, no se debe caer en la agresión verbal para llamar la atención o disminuir a la otra persona, el respeto aún cuando no pensemos igual es fundamental para que la relación no se vuelva tóxica.
7. Relaciones gobernadas por el chantaje emocional: Esto se refiere a aplicar un castigo emocional cuando la otra persona no hace exactamente lo que queremos. Al final la otra persona accede a comportarse de otra manera a causa del chantaje. Se soluciona como en el punto anterior con una mejor comunicación. Los sentimientos y emociones se pueden comunicar pero de una manera sana y sincera sin atacar a la otra.
Existen muchos tipos de relaciones tóxicas, la felicidad es una desición y la vida es muy corta para perder el tiempo con la persona equivocada, así que al final depende mucho de cada quién el camino que desee para si mismo, así que mucho ojo si ves alguna de estas señales antes de formalizar una relación.
Exelente el aporte que nos das sobre el tema. Ya que es una realidad que vemos a diario en nuestros seres mas cercanos y es que para poder amar a otra persona tenemos que amarnos primero a nosotros mismos, porque solo asi podemos dar a otros lo que tenemos.
Las relaciones tóxicas son un gran problema, ¿quién no tiene un familiar o un amigo que esta totalmente inmerso en una relación que ni le conviene ni le hace feliz y a la que todos ven poco futuro? ¿El problema?, que la otra persona no lo ve y no hay manera de hacérselo ver. Esto es muy frecuente y de hecho es probable que nos pase a nosotros mismos, son estas relaciones de las que al salir decimos: Menos mal que al final salí y lo he superado! (cosa que solo se suele ver una vez fuera). Paradójicamente las relaciones tóxicas son las relaciones de las que más cuesta salir.
Existen algunas señales que nos pueden dar señas que la relación es tóxica y que por lo tanto si ves alguna de estos puntos en tu relación lo mejor es que hagas una valoración real de lo que esta sucediendo, sin embargo la relación es de dos y si no encuentras interes en un cambio lo mejor es que termines con ese círculo y sigas con tu vida. Estas señales son<.
1. La relación en la que solo esta a cargo una persona: A veces es fácil involucrarnos con una persona que tome el control de las cosas, puede parecer fácil y cómodo que cojan las riendas de nuestra vida, puede que notemos menos presión así. El problema es que esto no es opcional, es decir si tu le das las riendas de tu vida a otra persona, lo más probable es que pierdas el derecho a opinar sobre que hace con ellas. Cuando quieras recuperar el control será muy difícil y la relación empeorará. En estos casos la persona pierde autonomía, independencia, autoestima y autoconfianza.
2. La idea que la pareja debe tener la función de "completarte" o "llenarte": En este punto nadie debe completarte, porque ya eres una persona completa, debes sentirte primero satisfecha contigo misma para luego llevarlo a una relación y nunca al revés. Suelen ser relaciones en las que luego no se toleran separaciones temporales ni estar solos. No es la responsabilidad de nuestra pareja rellenar esos vacíos existenciales, es un trabajo personal de cada uno. Si no estas bien contigo mismo eso se verá reflejado negativamente en la relación. ¿El mayor problema? Suelen llevar a una acumulación de resentimiento, aunque hayamos sido nosotros que hayamos decidido valorar las necesidades del otro por encima de las nuestras, luego eso quema.
3. Relaciones en las que el pasado se utiliza para justificar el presente: Si estas en una relación en la que continuamente se te culpa por el pasado, la relación es tóxica. Si ambos lo hacen la relación se convierte en una batalla por ver quien la “cagó” más y por lo tanto quien debe disculparse.
4. Las relaciones basadas en mentiras continuas: En las relaciones una omisión es como una mentira, las relaciones se basan en la confianza, abrirse a la otra persona y conocerse mutuamente. Ocultar información relevante solo debilitará la relación. Es cierto que se puede reparar la falta de confianza pero esto es muy difícil y requerirá del esfuerzo de ambas partes. De todas formas, al final la verdad siempre se sabe. La persona nos mentirá hasta que consiga que esa mentira se convierta en nuestra realidad, no debemos entrar al juego, si descubres una mentira, confróntala.
5. Relaciones sin perdón no es relación: Nadie es perfecto, pero también mucho cuidado con lo que vas a personar y sobre todo si ese perdón se convierte en algo continuo, perdonar es dejar el error en el pasado, pero con el compromiso de que no se volverá una costumbre. Debe existir un compromiso de reparar esa confianza.
6. Relaciones en las que la comunicación es agresivo-pasivo: La comunicación de pareje debe ser asertiva, no debe haber verdades a medias o indirectas, no se debe caer en la agresión verbal para llamar la atención o disminuir a la otra persona, el respeto aún cuando no pensemos igual es fundamental para que la relación no se vuelva tóxica.
7. Relaciones gobernadas por el chantaje emocional: Esto se refiere a aplicar un castigo emocional cuando la otra persona no hace exactamente lo que queremos. Al final la otra persona accede a comportarse de otra manera a causa del chantaje. Se soluciona como en el punto anterior con una mejor comunicación. Los sentimientos y emociones se pueden comunicar pero de una manera sana y sincera sin atacar a la otra.
Existen muchos tipos de relaciones tóxicas, la felicidad es una desición y la vida es muy corta para perder el tiempo con la persona equivocada, así que al final depende mucho de cada quién el camino que desee para si mismo, así que mucho ojo si ves alguna de estas señales antes de formalizar una relación.
"La felicidad es una desición"; muy cierto, pero además, considero que la autoestima es un pilar fundamental para lograr relaciones humanas óptimas, En cuanto al tema de pareja, pienso que cada persona acepta el amor o la pareja que cree merecer.
Me parecen muy útil la recomendacion, antes de formalizar una relación.
Creo que hoy día hay más relaciones toxicas que verderas relaciones, el acoso se confunde con "amor", asegurando que son felices... triste realidad