soy empleada federal en ciudad victoria tamaulipas. es una ciudad pequeña pero tiene su encanto. tengo 26 años y 4 de casada. soy ingeniera industrial, morena talla 7. me gusto de tener bonitas piernas y un busto pequeño pero durito con pezones muy chiqitos tambien. visto simpre sensual pero elegante. Resulta que hace dos años cambiaron al Gerente, mi jefe. desdeque llego me hicimos quimica pero nos reprimiamos por nuestros compromisos pero creo que nos insumuabamos mutuamente. yo coquetaaba y el me seducia. ya saben, sus atenciones y detalles y mis pantalones ajustados y blusas escotadas.. un dia me puese muy linda pensando en el. Conjunto blanco super entallado con blusa muy escotada. cuando llegue ese dia a la oficina del palacio federal fui la sensacion. todos me volteaban a ver y en la calle me sivaban y piropeaban. Cuando llegó mi jefe y me vio no pudo disimolar. sus ojos se llenaron de deseo. Buscó cualquier escusa para tenerme todo el dia junto a el en su oficina. Al final del dia tambien se las arreglo para que me qudara mas tiempo. Yo tambien puese de mi parte insinuando mas de lo nomal. Ya saben, agachandome para que me viera las piernas y cuzandolas al sentarme para que viera un poco mas. Cuando nos quedamos solos me pidio que le dictara unos datos, al inclinarme junto a el le deje ver mi escote y ya no aparto la mirada por un minuto. se hiso el silenco y empezó a manosearme las nalgas sin ningun pudor. no tardo mucho para meter la mano por debajo de la falda mientras solo nos seguamos mirado. despues de uno minutos se levanto para ponerme sobre el escritorio y quitarme la pantaleta. se bajo el pantalon y me penetro de un solo golpe. bombeo por unos minutos. fueron pocos minutos que desee todo el dia. No dijimos nada hasta que sono mi celular. era mi esposo. mi jefe se detubo solo para dejarme contestar pero no me la saco. con apenas un poco de alinto conteste- estoy ocupada. ya voy para alla- y colge. mi jefe bombe mas rapido y se vino en unos segundos. en cuanto termino me la saco y me fui. por cieto, olvide mis pantaletas.
