Hace año y medio que ando con una mujer. Ella es mayor que yo (tiene 35 años y yo 23). El problema es que, aunque disfruto mucho a su lado, también sufro, y no sé si en balance valga la pena continuar.
Tiene un problema de ira que reconoce, pero poco o nada ha modificado. Constantemente se molesta conmigo, gritandome, insultándome y arremedandome, por cosas que considero triviales: no haberla llamado durante una parte del día, preguntarle si ya comió, etc. A veces parece estar convencida de que la evito deliberadamente, e incluso de que la engaño con otra. Lo peor es que, bajo su óptica, soy culpable sí o sí de las acusaciones que me hace, a pesar de carecer completamente de evidencia o argumentos razonables.
A esto habría que sumarle que, incluso cuando no está molesta conmigo, me siento estresado por la posibilidad de hacer algo mal. En base a ello creo que he desarrollado comportamientos un poco obsesivos, como revisar a cada momento el celular, por ejemplo, por si me habló o mensajeó. Se podría decir, entonces, que vivo en estrés permanente, si bien este tiene sus altas y bajas.
Yo en lo absoluto quiero retratarla como "una bruja"; al contrario, yo la amo. Precisamente por eso es que quiero superar esto, aunque a veces es que dudo que sea posible, la verdad. Trato de entenderla porque, a fin de cuentas, todos tenemos nuestros problemas, y ese es el de ella. Pero creo que en ocasiones no me queda muy clara la linea entre la comprensión y apoyo, por un lado, y el dejarse abusar, por el otro.
Por cierto, no vivimos juntos ni tenemos hijos.
Saludos.