No sé si es una historia de amor, más bien es la historia que vivo ahora, la que quizás dentro de un tiempo, sea algo más concreto. Ahora se puede decir que estoy...esperando. No sé si alguna vez habéis tenido una persona en vuestra vida que llega como amigo/a, tenéis amigos comunes, celebráis barbacoas, cumpleaños, fines de años juntos, te ha visto en pijama, te ha visto vestida de fiesta,...de alguna forma siempre ha habido algo entre los dos, pero era algo que yo pensaba, que nunca se habló. Y esa eterna duda "¿sólo lo noto yo o tb él?". Pero hay miradas, gestos, que lo dicen todo ¿no? piensas "es mi amigo, pero ¿es raro que me guste? ¿él habrá pensado en mi también de esa forma?". Yo he tenido mis historias poco o nada importantes, personas que surgían, que me atraían por algo, y de nuevo las desechaba. No soy una persona que esté por estar, no me cuesta estar sola, prefiero eso de sola que...mal acompañada. Yo me alejé durante un tiempo, quizás para despejarme de esa situación, y de pronto oigo rumores de que está con una chica, y yo pienso "quiero ver eso", si yo los veo y le veo enamorado, sé que él no está aquí para mi...y bueno, si ahora estoy hablando de él es básicamente porque él hizo de esa h que empezó como un rollo, una relación de 2 años donde no había amor ni pasión, ni nada. Yo durante ese tiempo creo que le olvido, hago mi vida, salgo con amigos, incluso aparece un antiguo compañero de clase con quien surge una h, alguien que consiguió que durante unos meses yo esperara su llamada, y tuviera cierta...ilusión podríamos llamarlo. Pero rápido cayó por su propio peso. Era totalmente mi opuesto, no había de dónde tirar. Hace dos navidades nos juntamos en casa de una amiga común, cubatas, pelis, juegos, cartas,...celebración entre amigos. Él viene con su ¿novia? y durante esa noche yo sigo notando las mismas miradas, y la misma química, y pienso que no entiendo nada. Todo sigue ahí, aunque llevemos tiempo sin vernos. A partir de principios de año se acerca a mi y somos más amigos, y mensajes al móvil, y salimos juntos, y hay más roce, y yo en junio me harto y le cojo y le digo que me lo niegue si quiere pero que necesito saber si hay algo entre nosotros; su respuesta es que le gusto desde hace mucho, y que claro que hay algo entre nosotros. Ahí empieza un juego peligroso de salir como amigos, y liarnos varias veces. Hay mucha química, y mucha atracción. Nunca he besado a nadie como a él, ni he sentido un beso de esa forma. Podría estar tocándole toda la noche. Al principio llevo bien la situación, hasta que pasa el verano y en octubre no doy más de mi; me agobio, y pongo distancia, si no somos pareja no tengo que dar explicaciones. Pasa 1 mes sin vernos y en noviembre 1 encuentro casual hace que vuelva a surgir. En diciembre le digo que necesito que se decida, que no somos nada, que si le gusto que se arriesgue DE UNA VEZ. Me suelta un rollo absurdo de que no es el momento, de que necesita centrarse en los estudios, y de que no se plantea nada más. Yo creía que sabía lo que era una bajona pero de pronto lo supe. Navidades, mes de enero, y mes de febrero tristes, sabiendo que me había enamorado en el momento en que le perdía. ¿Sabes esa sensación? De que estás en sus manos. Desde entonces no me planteo nada concreto, decido que me hace el mismo daño no verle que verle y echarle de menos, así que por el momento me centro en mi trabajo, y espero que el día a día me salve de este huracán. Cuando tienes a alguien metido tan dentro ¿cómo le sacas? Hace un mes comenzó la rutina de nuevo de salir juntos, yo más relajada, y él con la misma actitud, de buscarme, de sentarse siempre a mi lado, de mirarme,...y yo me vuelvo loca, claro. Me gustaría pensar que sólo ha sido el comienzo de algo que promete. Es el sentimiento más completo que he tenido por nadie, atracción, química, forma de ser...es mi amigo. No sé, estoy un poco perdida, pongo distancia y todo sigue ahí, no se va...
Si has leído esta historia, ya ves, ¿cómo seguirá? espero que los días me traigan algo bueno, y dentro de un tiempo yo pueda contar aquí que le tengo a mi lado.
Un beso y gracias por leer...
