No existe el amor, entre maduras y jovenes.
Se considera que en una relación de enamoramiento, se dice pareja a una relación entre dos personas (par) cuyas edades no superen los siete años de diferencia. El término pareja define a dos personas semejantes en su morfología (edad) y similares o complementarios sicológico. Si estas características no se dan por que existen grandes diferencias de edad o sicología opuesta o diferente, ya no se debe usar el término pareja, sino; DISPAREJA.
El truco de la madre naturaleza, pone un límite natural y es, lo dispar de una relación presuntamente afectiva entre dos personas, cuya diferencia de edades entre ambas, marca la posibilidad de que una de ellas pueda ser progenitor de la otra. Si ya, a partir de los 7 años no se puede considerar pareja, sino dispareja; pues imagínense una diferencia igual o superior a 18 años. Dispareja total.
Muchas personas no encuentran el amor, porque buscan en un mundo irreal, idealizado solo dentro de su burbuja mental, que no existe fuera de ellos.
La naturaleza se basa en la Ley de la Correspondencia. Nosotros, debemos percatarnos que formamos parte de la naturaleza y sujetos a la misma Ley.
No es lo mismo buscar el amor en el jardín de la juventud, que buscar el amor en el bosque de la madurez.
Tenemos que ser consecuentes con nuestros biorritmos. Cada etapa de la vida requiere sus necesidades, para no acarrear carencias. La primavera es distinta al otoño, ambos son necesarios y bellos, pero diferentes.
No puedes buscar el amor de la primavera en el otoño ni viceversa, si lo haces, no estás en armonía.
Cuando un hombre de 70 años, tiene una relación de dispareja, con una mujer de 40 o menor, se le llama viejo verde o maduro con lolita.
Viceversa, cuando una mujer tiene relación dispareja con un hombre menor o mucho menor que ella, se le llama COUGAR.
Yo no creo en el amor de enamoramiento puro, entre dos personas con más de siete años de diferencia.
Será otro tipo de amor que detrás oculta distintas muestras de carencias.
No olvidemos, que en ambos casos, puede existir una patología de desequilibrio mental y emocional.
La estadística real, nos dice que el 9999% de estas relaciones no tienen estabilidad ni permanencia y eso que se dan más, en clases sociales altas, actores y grandes empresarios; ya que se busca poder, seguridad, fama, dinero, estabilidad, etc.
(Oveco Auriexans).-