Aunque no entro aquí para que me digáis que es normal, que ya no estamos juntos, que yo también reharé mi vida, etc. Esa no es la cuestión.
Lo que pasa es que mi ex es muy querido en mi casa. Desde hace muchísimos años, viene aquí de visita, a comer, a dormir, etc. En mi casa ha sido como un hijo más (de hecho, tuvo problemas en su casa y se vino aquí una temporada... y todos quedaron encantados! Ayudaba en las tareas, hacía la compra y demás)... y vaya la alegría que se armó, cuando confirmamos nuestra relación!
Pero terminé dejando la relación, porque conocí a otro chico y estaba confundida... aún así, mi ex siguió viniendo a casa, pues conservamos la buena amistad.
He de reconocer que me equivoqué, al final con el otro chico no me hice demasiadas ilusiones (gracias a Dios, pues estaba casado). Y fue cuando me di cuenta de que aún sentía algo por mi ex... pero no le podía pedir otra oportunidad, pues no quería que se sintiera usado o que pensase que estaba jugando con él.
Y así han pasado los meses. Ahora, tiene novia... y este es el problema.
Dejándo aparte que me duele (aunque soy bastante fuerte y lo llevo bien), pues ya no viene por mi casa... y claro, mis padres y demás me preguntan por él. Y yo sólo atino a decirles que es que no tiene tiempo (creo que ellos no son tontos, que aunque diga que ya no siento nada por él y sea convincente... notan que no es así).
Ellos me dicen que le invite, pero a mí se me hace violento (pues poniéndome en el lugar de la novia, no me gustaría). Pero no soy capaz de decírles que tiene pareja... porque mis padren le tienen idealizado, y siento que eso no les gustará (pues como deben de intuir lo que siento...). Y tampoco quiero que me intenten animar ni nada, porque lo he aceptado.
Hago bien ocultándolo?