Buenas a todas, no suelo escribir mucho por aquí, más bien lo hago para desahogarme y para compartir experiencia con otras mujeres que se sientan como yo.
Hace ya años que estoy con mi pareja y desde hace ya mucho tiempo suelo quedarme con él en casa de sus padres. Al principio era sólo los fines de semana, pero los últimos meses como estoy desempleada y ya finalicé mis estudios la cosa ha llegado a alargarse por semanas. Tanto mi pareja como yo somos jóvenes, él empezó a trabajar hace un par de meses y yo sigo buscando un empleo estable que nos permita independizarnos y empezar ya a hacer nuestra vida. Pero como la situación es tan mala económicamente hablando no nos podemos independizar. No obstante, al poder quedarme varios días en casa de mis suegros con mi pareja, la cosa se mitiga un poco.
El problema es que estoy hasta las narices de estar encerrada en su casa. No tengo ningún problema con su familia, al contrario, ellos vienen de una familia y de una cultura donde es normal que la pareja conviva con los suegros y están encantados con que esté por aquí porque siempre viene bien un par de manos extras o una persona con la que charlar (mi suegra es la única mujer de su casa y poder hablar de cosas de "chicas" de vez en cuando le entusiasma). El asunto es que aunque ellos viven en el mismo pueblo que yo tienen la casa en mitad del monte, literalmente, por lo que poder salir de aquí para hacer cualquier gestión es prácticamente imposible.
Ya he hablado con él sobre esto pero parece no entenderlo porque dice que tengo total libertad para hacer lo quiera en su casa, y es cierto hasta cierto punto. Puedo hacer lo que me venga en gana, pero como en mi casa en ningún lugar. Además, mi casa está en el pueblo por lo que puedo ir a cualquier lado andando o coger un par de autobuses y presentarme en la capital en menos de una hora, cosa que desde el medio del monte es imposible. Es agobiante sentirte encerrada y ver que no puedes hacer más que 4 cosas contadas sin tener la posibilidad de salir a tomar algo, quedar con quien quieras o presentarte en la capital para hacer cualquier gestión que corresponda. Encima, ya ni tenemos sexo porque "no le apetece, está cansado" y similares. Al final, me tiro todo el día encerrada en una casa que no es la mía, sin posibilidad de hacer nada que no sea buscar empleo por internet o mirar la tv, la mitad del día sola porque los demás se van a trabajar (bien es cierto que mi suegro trabaja desde casa, pero no me voy a poner a charlar mientras está ocupado), esperando a que regrese mi novio para que esté un rato a su bola después del curro y durmiendo con mi pareja el cual está más interesado en dormir abrazado conmigo que en hacer algo juntos aunque sea dar un paseo. Vamos que me siento como un peluche al que solo se le echa de menos cuando vas a dormir para poder abrazarlo y esta monotonía unido al hecho de que no tengo ni la posibilidad de ir al banco a actualizar la cartilla me está matanto, pero él está feliz de tenerme a su lado durmiendo en la cama......
Lo que más me revienta es que no entienda cómo me siento, estoy aislada de todo y de todos sin poder hacer absolutamente nada, pero como duerme conmigo él está feliz. Es la última vez que voy a su casa a dormir, que se compre un oso amoroso o una muñeca inchable, ya depende de sus gustos.