Estoy hasta la seta de tantos condicionantes 
El tabaco.
Llevo 4 horas y media sin fumar -desde que me he levantado de la siesta- y estoy con taquicardias.
Pero vamos a ver ¿qué necesidad tengo yo de pasar esto y de sufrir de esta manera si yo NO quiero dejar de fumar?
Pero más que la falta (o no) de nicotina, lo que me agobia son los condicionantes actuales, que son casi peores que el mono de la nicotina. 
Una de tantas.
Hace poco me tuve que desplazar a otra ciudad en el coche de un colega.
Me chupé 400 km. sin fumar. Lógicamente el chaval no fuma y no tiene por qué soportar mis humos.
Llegamos por fin a un bar a hacer un alto y lo primero es encenderme un cigarro en cuanto pongo la pata en el suelo camino del bareto. Me topo con un cartel de *no fumar* en la puerta, con lo cuál me ves en el aparcamiento en toda la solana fumándome un cigarro deprisa y corriendo en toa la chichacherra mientras mi colega está en el bar todo fresquito con el aire acondicionado sentado tomándose su birra helada.
Me sentí como una auténtica hilipoyas.
Seguimos viaje, sin fumar por supuesto.
Llego a donde íbamos, que también es una casa de personas que no fuman. Total, que me tengo que ir a la terraza a seguir chupando solana y cagándome en todo lo que brilla.
Y luego la vuelta, repetición de la ida.
Y días como estos unos cuantos.
Hoy me encuentro con la desagradabilísima sorpresa de que el tabaco ha subido OTRA VEZ. Cabreo monumental por mi parte.
Y en la oficina repetición de la jugada, haciendo malabarismos para echarme un cigarrico, porque ahora ni en el servicio puedes, que se te cae el pelo, con lo cuál a seguir chupando solana en el tejado, en el mismo tejado donde en invierno me agarro las bronquitis por el mismo motivo.
Vale, podréis pensar, pues tía deja de fumar.
Joer, es que NO QUIEROOOOOOOOOOOO.
Pero claro, está ya llegando a un punto la persecución que es que me toca las narices seguirle el juego al ¿gobierno? con su p2ta campaña antitabaco y dejar de fumar.
Que no quiero, que no me da la gana.
Pero por otro lado me veo obligada a seguirlo, porque las leyes son ahora así y me temo que si algún día cambian, serán a PEOR.
Y para colmo encima me dedico a pagar unos impuestos bestiales, que con lo que vale ya el tabaco podría cenar langosta todos los fines de semana.
Supongamos que dejo de fumar.
Jeje, ahora hodo al gobierno que no pago impuestos. Sí, pero me hodo yo porque no hago lo que quiero, me gusta y me apetece -eso sin mencionar los monos-, además que a ellos ni fú ni fá si dejo de pagar impuestos, porque en el futuro eso que se ahorrarán de seguridad social por mi tabaquismo.
Con lo cuál haga lo que haga (yo) ellos llevan las de ganar y yo las de perder. Siempre.
Sólo que la diferencia es que puedo elegir cómo hacerlo, o seguir chupando aparcamientos mientras los colegas están fresquitos tomando birra en el bar, o entrar por el aro como un borrego y dejar de fumar porque se supone que al final tarde o temprano todo el mundo va a acabar claudicando.
Ambas ideas me agobian una barbaridad, porque es que en el fondo NO quiero dejar de fumar, pero es que me da porculo tremendamente tanto condicionante y ser siempre esclava de las circunstancias.
Ya sé que está escrito en plan chorra, pero no, es tal cuál en el punto en el que estoy ahora mismo. Soy una rebelde sin causa y me hode tanto una premisa como la otra.
Ah, por favor, absteneros los que vengáis a darme la buenaventura y a hablarme sobre las majaderías de que es bueno para mi salud, el olfato y semejantes chorradas que los fumadores estamos hasta las narices de oír.
P/D. no le he dicho a nadie que he dejado de fumar hace un rato, porque sinceramente, si me dan la enhorabuena me voy a cagar en todos sus muertos. Sólo quiero salir de esta situación tan estresante.
Ver también
Ya estamos otra vez con la salud.... 
Devo, ese NO es el tema.
Me da igual que se me repudie o no, tampoco me importa. Ni siquiera aunque me repudiera yo misma.
El problema es que soy capaz de hacer cualquier cosa con tal de no entrar por el aro sólo porque un fulano se haya sacado la ley de la manga. No sé cómo explicarlo exactamente.
Me revienta eso de *las medidas disuasorias* porque me hace sentir como un borrego sin libre albedrío.
No me gusta que me digan cómo debo vivir, cómo debo pensar. Tengo cerebro más que suficiente para ejercer mi libertad y hacer lo que me dé la gana sin necesitar la opinión del fulano del ministro de turno.
Por eso me siento en una encrucijada, por un lado está el camino cómodo y fácil (y sano): agachar la cabeza.
Y por otro está seguir haciendo lo que me sale de las narices, como siempre, pase lo que pase, cueste lo que cueste y pese a quien pese.
Es una cuestión de principios, más que de economía o salud.
Ja!!!! en eso tienes toda la razón
Y si ya vas al wc flipas, unas rayas de nieve de kilómetros.
Ah, pero no se te ocurra encenderte un pito ¿eh? que es mú malo.
Si tus motivos son iguales que los míos
Pero a la hora de poner en marcha la maquinaria y ponerme a ello se me corta la digestión.
Ojalá te vaya bien neni, te lo deseo de corazón, y sobre todo que esa decisión te aporte paz de espíritu, no un enkabronamiento como el que yo tengo.
A mí también me dan unos monos horrorosos 
Jaja, que me pasa igual que a ti, me pongo a llorar a moco tendido sin motivo y que siento que se me acaba la vida.
Y claro, a mí esa emotividad me descuadra completamente.
Desde que descubrí los chicles de nicotina a mí me ha ido bien las veces que he dejado de fumar.
Claro, y ahora te preguntarás que si ha habido veces que he dejado de fumar (una vez 8 años) cómo es que he vuelto.
Pues no lo sé, lo que dice Devo, que de vez en cuando -aunque pasen años- te acuerdas y en una de estas caes.
Sobre todo si te pasa como a mí que siempre me ha encantado el olor del tabaco, siempre, fumara o no. Con lo cuál en mí el peligro de recaer es siempre constante.
Buff, ya sé que se puede
pero el peor problema no es la nicotina, son mis propios güevos.
Pero neni, si yo fumo muy pocoooo
Salgo a una media de 7-10 cigarros al día, y eso como mucho.
Ni de lejos tengo tabaquismo, y el problema es que me siento ¿manipulada? por la sociedad/gobierno, con lo cuál, aunque quiera dejarlo, mi vena rebelde y tocapelotas se me pone en contra.
No sé si me explico. 
*gracias a esa presión* 
algunas personas dejarán el tabaco.
Exacto. Eso es. Me hode lo más grande el condicionante de presión para que haga algo.
Si quiero hacer algo por motu propio (yo) lo hago, pero si me presionan para hacerme pensar en una dirección y que eso tenga como consecuencia un encarrilamiento social (dejar el tabaco), no hay webos a motivarme.
No sólo no me motivo sino que encima me enkabrono viva, y ahora mismo estoy metida en un punto muerto ridículo.
Y en el metro ¿no te cuerdas de fumar en el metro? Y en el autobús, el revisor pasando con el cigarrico colgando de los morros.
Qué tiempos de la españa cañí!!
Jo!!
Vaya rollo tía.
Vamos, lo que aquel día
en el aparcamiento es que no tiene nombre.
Y aunque dejara de fumar, en ese sitio desde luego no vuelvo a parar.
Vamos a llegar a un punto en que vamos a ser tan puros, inmaculados e incorruptos que vamos a dar asco. 
Nono, si mi dependencia no es grave
ya te digo, si salgo a una media de 7-10 cigarros al día como muuuuucho.
Lo que sí que es grave es el tamaño de mis webos. Si no fuera por esta nueva imposición social no me sería tan difícil dejarlo, pero me basta pensar que le estoy dando gusto a alguien para que se me quiten las ganas de dejarlo.
Esa es la cosa
Que en vez de vivir todos a gusto siendo un poco tolerantes, ya sea inflándose a chorizo, cerveza o puros, esto parece una guerra para acabar todos hodidos, cuando la madre el cordero creo que lo importante es que hagamos la vida un poco agradable (o menos desagradable) para TODOS.
Estoy totalmente de acuerdo con que es un país de gentuza y de hipócritas, y el post que ha escrito el hombre éste (aún escrito con toda su buena intención), es un ejemplo de lo tremendamente desmotivante que puede ser este tema.
Todo tiene efecto a largo plazo, ya sea comerse 12 hamburguesas, beberse 3 litros de vozka o fumarse 3 cajetillas, eso es irrelevante.
Al final siempre llego a la misma conclusión, me pasaré por el forro las buenas intenciones de papá Estado -que las intenta meter a la fuerza y bajo mi punto de vista con una clara intención manipuladora- y haré lo que me salga de los cataplines, bajo mi propia responsabilidad.
Si es que esto se está pasando de la raya
Aquí ya no se pueden ni pasear los perros por la playa sin la visita de los de protección civil, no puedes ir en bici sin que te pongan una multa por no llevar casco, y la lista sería infinita.
Es tal la opresión que me da la sensación de que si estornudo demasiado fuerte ya se me va a presentar la guardia civil.
A mí me parece estupenda la idea de no echar humo al prójimo, pero para eso que sigan con los bares de fumadores y de no-fumadores, pero por lo visto lo que se pretende es que no se pueda fumar en ningún sitio, salvo en la calle o en casa.
¿Y si esto se hiciera extensible a las bebidas alcohólicas? bares de alcohol y bares de abstemios!!!! hasta que llegue una ley que diga que todos los bares serán de abstemios y que la caña te la tomes en tu casa.
Yo no bebo, NADA, pero me parecería igual de ridículo. O que prohiban las tartas o los helados, para no envenenarnos las arterias.
Demasiadas leyes y demasiado constreñimiento sin sentido.
Y ya puestos
que también prohíban los deportes de contacto, y los deportes de riesgo, y hacer alpinismo, y hacer saltos base, y los viajes a países exóticos no sea que traigamos alguna porquería, etc.
Calla, que estoy dando ideas.
Claro que han aumentado
Es condición humana que cuando prohíben algo apetece más hacerlo, vamos, no hace falta ser psicólogo para saberlo.
Y si no echa un vistazo a la Ley Seca de los años 20 en USA, nunca hubo tantos alcohólicos como en aquella época.
En mi círculo inmediato sólo han dejado de fumar 2 personas en todo este tiempo, sin embargo los que fuman fuman mucho más.
¿Sabes? el otro día leí que lo que ahora empieza a tomar auge otra vez es la heroína, algo hasta la fecha sin mucha relevancia desde los famosos años 80.
La crisis está haciendo que la gente busque formas de evadirse acordes a la crispación.
Te lo voy a contar ahora que no nos oye nadie
Estoy en un punto muerto ridículo.
Fumo sólo por las mañanas, por las tardes no.
Por las mañanas como que se me olvida el tema y no le doy importancia, no soy de las que se comen demasiado el tarro.
Pero según transcurre el día me lo vuelvo a planear, con el resultado de que me como un chicle de nicotina en 2 cachitos y no fumo en toda la tarde/noche.
Y así llevo ya varios días.
Me he quedado encasquillada ente lo que quiero hacer, lo que debería hacer y lo que no me da la gana hacer.
Esta tarde ya he vuelto a fumar (obvio) porque esta media tinta no la puedo prolongar indefinidamente, pero sigo comiéndome la olla.
Mi xurri anda flipado el hombre, de repente el cenicero aparece impoluto como que de sopetón aparece una colilla fantasma.
Por cierto ¿qué tal sigue tu costilla?
Jajajajaja,
mira que me he reído leyéndote
Ya se sabe, ha quedado demostrado, según estadísticas, que al prohibir tanto fumar consiguen el efecto contrario y aumentan las ventas. 
Hipatia
Tia, aun recuerdo este post
Y los buenos tiempos foriles, esos tiempos llenos de participaciones (y tirones de pelo), jo! q añoranza me ha entrado.
