Mi esposo padecía hipertensión arterial. Nunca quiso ir a tratarse ni cambiar sus estilos de vida. Luego vino la disfunsión eréctil y eso nos alejó mucho, pues casi no teníamos relaciones. Si acaso una o dos al año. Mucho le insistí que se tratara por los riesgos que eso tenía, pero nunca quiso oírme. Entonces, hace dos años descubrí que estaba saliendo con prostitutas. Aquello fue terrible para mi, pero intenté comprender su desesperación. El intentaba que aquello significara un estímulo y se quedó enganchado. Fuimos a terapia de parejas durante 6 mese y las cosas parecieron mejorar. Estaba más interesado en mi y salíamos a menudo, pero luego de 5 meses de terapia, descubrí que guardaba en su celular fotografías de las prostitutas en los hoteles. No entendía yo como podía guardar esas cosas que me hacían tanto daño y que se suponía estábamos pagando un especialista para olvidar eso. Decidí ir con mi abogado a solicitar el divorcio. Eso fue el 27 de mayo. Discutimos, me suplicó, me dijo que nunca jamás sus sentimientos por mi estuvieron en juego, que aquello fue sólo sexo por dinero, que había sido un ... y que no lo dejara, que el me amaba y no me quería perder... Yo no cedí y me cambié de habitación. No tenía sentido. Algo me decía que me ocultaba más de lo que decía. El día 01 de junio, me desperté en la madrugada con un estruendo. Al salir de la habitación vi que mi esposo estaba muy mal. Lo llevé a la clínica. Sufrió un ACV fulminante. Estuvo muy grave. Lo operaron de emergencia, pero ameritaba otra cirugía mientras su cerebro se desinflamaba. No me daban esperanzas para èl. Y en ese momento, mientras me sentía tan culpable, dos prostitutas diferentes le mandaron msj a su celular pidiéndole verse en el lugar de costumbre. Ahí supe que durante los meses de la terapia el continuó viendo mujeres... Pasaron 6 largos meses de hospitalización y dos cirugias y terapia... En su trabajo lo incapacitaron, ya no maneja, aunque camina y habla y ayuda en lo que puede, pero en su mente es como un jovencito de 14 años, impaciente, impulsivo, temperamental, que grita y pelea y hace pataletas. Ya no es màs un amante para mi, y no lo puedo abandonar porque está solo... y dice que si lo dejo él simplemente morirá de pena... Recuerda todo lo que le ocurrió, pero por los daños en su cerebro, el sexo no le interesa... A veces quiero salir corriendo, pero serìa una canalla si lo dejo cuando más me necesita... Que me aconsejan?