Sí, esa es la cruda realidad
No nos gusta pero es lo que hay. No mirar al otro, fijarse en lo que uno mismo hace, y si uno no está contento, pues buscar, comparar y aleale...
Pero hay que saber ser discretos también, hay formas de tener contentos a los trabajadores de una forma ajena a la puramente económica, una de esas formas es cuidando ciertas formas.
En cosas asi redica la diferencia entre esperar a que se vaya el jefe para ponerlo de vuelta y media e irse de la empresa en cuanto que uno encuentre algo mejor, aunque sea por cuatro míseros duros, y el tener a un empleado fiel y contento. Este trabajará mejor y por tanto, el hijo del jefe podrá tener más coches para aumentar su ego. Ah, y ahorrandose el tontocurso de motivación empresarial!!!