Cada vez me gusta más, cuando mi novio pasa su dedo por mi ano, despacito al principio y más duro después, va entrando poco a poco en mi culo. En casa suelo andar sin bragas y la otra tarde estaba en la cocina,preparando la cena, y solo llevaba un camisón corto. Vino por detrás sin que me diera cuenta y me pasó la mano por toda la raja del culo, hasta llegar al ano. con la otra mano empezó a pellizcarme el pezón derecho que se me puso durísimo y yo me tocaba, a la vez el clítoris. Me corrí dos veces seguidas... fue magnífico.