Dos veces me ha engañado
Llevo cinco años con mi pareja. Hace dos años, dejó la relación durante dos meses, porque conoció a otra y directamente cortó la relación. Me dijo que nos habíamos alejado y que yo no le echaba cuenta. Pero le insistí y finalmente admitió que había una tercera persona. Yo lo quería mucho y me hundí. Estuve de psicologos pero luché por la relación. Volvimos. Su affaire duró dos meses. Cuando ya estabámos juntos de nuevo, me sentía muy desconfiada. Y comencé a mirarle el movil cuando se duchaba y efectivamente seguía en contacto con ella, prácticamente a diario se enviaban saludos y emoticonos. Esto duró más de un año. Yo se lo reprochaba y teníamos muchas broncas por eso, me volví totalmente desconfiada y controladora. Se me apagó la vitalidad y nuestra relación se convirtió casi en exclusiva sexual. Finalmente, los mensajes cada vez eran menos, hasta que prácticamente desaparecieron. Comencé a sentirme más segura y por fin volvió un poco la tranquilidad. Hasta que hace una semana volvió a hacerlo. Pero con otra. Un día se fue a esperarla a la salida del trabajo y me fui detrás y le abordé. Ella no había llegado. Se dió cuenta al instante que le había pillado. Me fui a casa y se vino tras mía. Y me dijo que sólo había sido una vez y que fue casual y que había quedado para tomarse un café y cerrar la historia. Y que en mi afán de controladora no le había dejado ni un momento para cerrar el tema. De nuevo, la culpa era mía. Que no le dejaba espacio, que le axfisiaba. Antes que no le echaba cuenta, ahora que estaba muy encima. Siempre yo la culpable. Al día siguiente, después de muchos lloros, horas y horas de discusión y sexo, salimos y nos lo pasamos bien. Pero al levantarnos por la mañana, me dice que quería probar otra vez con ella, para poder decidir y que había tres opciones: seguir conmigo ("esa es mi opción preferida" seguir con ella o quedarse sólo. Y me pide un tiempo para poder decidir. Imaginaros mi reacción. Le dije que no hay tiempo ni nada, que ahora mismo le mandara un mensaje de despedida y qué se acabó. Y delante mía. Se negó. Y me dice que yo con mi actitud estaba engordando y dándole importancia a ese tema, que para él no era tan importante. Le dije que si no era importante cómo me plantea esas opciones. Finalmente, le dije: mira, tú eres incapaz de decidir nada, estuviste un año tonteando con la otra y ahora yo no voy a pasar por lo mismo. Mi vida fue un infierno. Yo nunca he mirado el movil ni he espiado ni soy desconfiada. Y no quiero volver a pasar por eso. Así que le dije que se acababa. Eso fue hace dos días. Ayer me envió un mensaje preguntandome cómo estaba que no constesté. Y también me llamó y no se lo cogí. Estoy destrozada, lo quiero con locura, y se me hace muy cuesta arriba.
Ver también
Pues si le quieres con locura ...no le destierras de tu vida..malo.
¿De qué te sirve haberlo pasado tan mal hace un año.? Con picologos, llorando, sintiendote engañada, y total ¿para qué.? Para volver otra vez a las mismas, a sufrir.
Quieres perdonarle otra vez. El sabe que no le vas a dejar y por eso te llama y te llamará hasta que le contestes , te venga a casa llorando , tengais sexo y.....vuelta a empezar.
Ahora estás abajo, hundida , pero él sabe como subirte arriba y estar en la gloria del cielo, pero...te volverá a bajar de golpe y el batacazo va a ser otra vez lo mismo que ahora .
Y lo que es peor, el tercero.!!
Pues ya sabes... quieres con locura a un caradura (y he sido muy fino en mi escrito).
Llevo cinco años con mi pareja. Hace dos años, dejó la relación durante dos meses, porque conoció a otra y directamente cortó la relación. Me dijo que nos habíamos alejado y que yo no le echaba cuenta. Pero le insistí y finalmente admitió que había una tercera persona. Yo lo quería mucho y me hundí. Estuve de psicologos pero luché por la relación. Volvimos. Su affaire duró dos meses. Cuando ya estabámos juntos de nuevo, me sentía muy desconfiada. Y comencé a mirarle el movil cuando se duchaba y efectivamente seguía en contacto con ella, prácticamente a diario se enviaban saludos y emoticonos. Esto duró más de un año. Yo se lo reprochaba y teníamos muchas broncas por eso, me volví totalmente desconfiada y controladora. Se me apagó la vitalidad y nuestra relación se convirtió casi en exclusiva sexual. Finalmente, los mensajes cada vez eran menos, hasta que prácticamente desaparecieron. Comencé a sentirme más segura y por fin volvió un poco la tranquilidad. Hasta que hace una semana volvió a hacerlo. Pero con otra. Un día se fue a esperarla a la salida del trabajo y me fui detrás y le abordé. Ella no había llegado. Se dió cuenta al instante que le había pillado. Me fui a casa y se vino tras mía. Y me dijo que sólo había sido una vez y que fue casual y que había quedado para tomarse un café y cerrar la historia. Y que en mi afán de controladora no le había dejado ni un momento para cerrar el tema. De nuevo, la culpa era mía. Que no le dejaba espacio, que le axfisiaba. Antes que no le echaba cuenta, ahora que estaba muy encima. Siempre yo la culpable. Al día siguiente, después de muchos lloros, horas y horas de discusión y sexo, salimos y nos lo pasamos bien. Pero al levantarnos por la mañana, me dice que quería probar otra vez con ella, para poder decidir y que había tres opciones: seguir conmigo ("esa es mi opción preferida" seguir con ella o quedarse sólo. Y me pide un tiempo para poder decidir. Imaginaros mi reacción. Le dije que no hay tiempo ni nada, que ahora mismo le mandara un mensaje de despedida y qué se acabó. Y delante mía. Se negó. Y me dice que yo con mi actitud estaba engordando y dándole importancia a ese tema, que para él no era tan importante. Le dije que si no era importante cómo me plantea esas opciones. Finalmente, le dije: mira, tú eres incapaz de decidir nada, estuviste un año tonteando con la otra y ahora yo no voy a pasar por lo mismo. Mi vida fue un infierno. Yo nunca he mirado el movil ni he espiado ni soy desconfiada. Y no quiero volver a pasar por eso. Así que le dije que se acababa. Eso fue hace dos días. Ayer me envió un mensaje preguntandome cómo estaba que no constesté. Y también me llamó y no se lo cogí. Estoy destrozada, lo quiero con locura, y se me hace muy cuesta arriba.
Lo siento mi querida niña, pero no le quieres. Eres dependiente emocional,que es otra cosa muy diferente: no te quieres a ti misma y sin ese requisito, no puedes querer a nadie.
Llevo cinco años con mi pareja. Hace dos años, dejó la relación durante dos meses, porque conoció a otra y directamente cortó la relación. Me dijo que nos habíamos alejado y que yo no le echaba cuenta. Pero le insistí y finalmente admitió que había una tercera persona. Yo lo quería mucho y me hundí. Estuve de psicologos pero luché por la relación. Volvimos. Su affaire duró dos meses. Cuando ya estabámos juntos de nuevo, me sentía muy desconfiada. Y comencé a mirarle el movil cuando se duchaba y efectivamente seguía en contacto con ella, prácticamente a diario se enviaban saludos y emoticonos. Esto duró más de un año. Yo se lo reprochaba y teníamos muchas broncas por eso, me volví totalmente desconfiada y controladora. Se me apagó la vitalidad y nuestra relación se convirtió casi en exclusiva sexual. Finalmente, los mensajes cada vez eran menos, hasta que prácticamente desaparecieron. Comencé a sentirme más segura y por fin volvió un poco la tranquilidad. Hasta que hace una semana volvió a hacerlo. Pero con otra. Un día se fue a esperarla a la salida del trabajo y me fui detrás y le abordé. Ella no había llegado. Se dió cuenta al instante que le había pillado. Me fui a casa y se vino tras mía. Y me dijo que sólo había sido una vez y que fue casual y que había quedado para tomarse un café y cerrar la historia. Y que en mi afán de controladora no le había dejado ni un momento para cerrar el tema. De nuevo, la culpa era mía. Que no le dejaba espacio, que le axfisiaba. Antes que no le echaba cuenta, ahora que estaba muy encima. Siempre yo la culpable. Al día siguiente, después de muchos lloros, horas y horas de discusión y sexo, salimos y nos lo pasamos bien. Pero al levantarnos por la mañana, me dice que quería probar otra vez con ella, para poder decidir y que había tres opciones: seguir conmigo ("esa es mi opción preferida" seguir con ella o quedarse sólo. Y me pide un tiempo para poder decidir. Imaginaros mi reacción. Le dije que no hay tiempo ni nada, que ahora mismo le mandara un mensaje de despedida y qué se acabó. Y delante mía. Se negó. Y me dice que yo con mi actitud estaba engordando y dándole importancia a ese tema, que para él no era tan importante. Le dije que si no era importante cómo me plantea esas opciones. Finalmente, le dije: mira, tú eres incapaz de decidir nada, estuviste un año tonteando con la otra y ahora yo no voy a pasar por lo mismo. Mi vida fue un infierno. Yo nunca he mirado el movil ni he espiado ni soy desconfiada. Y no quiero volver a pasar por eso. Así que le dije que se acababa. Eso fue hace dos días. Ayer me envió un mensaje preguntandome cómo estaba que no constesté. Y también me llamó y no se lo cogí. Estoy destrozada, lo quiero con locura, y se me hace muy cuesta arriba.
hay mujer sufres porque quieres,mira dice el dicho:
CUANDO ALGUIEN ES INFIEL LA PRIMERA VEZ ES CULPA DEL INFIEL,LA SEGUNDA VEZ ES CULPA DE QUIEN PERDONO,te animaste a seguir cuando el ya te habia sido infiel y decidiste seguir,jugartela y mira lo que paso,mujer aprende esto,cuando alquien ama de verdad,jamas engaña a su pareja,cuando se ama no se mira a nadie mas,cuando se ama se mira solo por esa persona cuando esta a tu lado,cuando se ama se dedican solo a ti,cuando ya el amor no existe o va desapareciendo pasa lo de tu situacion,creiste y volviste a creer y mira como te pagaron? ten amor y dignidad y busca tu tranquilidad,amor,cariño en un hombre que valore todo lo que tu puedas dar y que te respeten.
Llevo cinco años con mi pareja. Hace dos años, dejó la relación durante dos meses, porque conoció a otra y directamente cortó la relación. Me dijo que nos habíamos alejado y que yo no le echaba cuenta. Pero le insistí y finalmente admitió que había una tercera persona. Yo lo quería mucho y me hundí. Estuve de psicologos pero luché por la relación. Volvimos. Su affaire duró dos meses. Cuando ya estabámos juntos de nuevo, me sentía muy desconfiada. Y comencé a mirarle el movil cuando se duchaba y efectivamente seguía en contacto con ella, prácticamente a diario se enviaban saludos y emoticonos. Esto duró más de un año. Yo se lo reprochaba y teníamos muchas broncas por eso, me volví totalmente desconfiada y controladora. Se me apagó la vitalidad y nuestra relación se convirtió casi en exclusiva sexual. Finalmente, los mensajes cada vez eran menos, hasta que prácticamente desaparecieron. Comencé a sentirme más segura y por fin volvió un poco la tranquilidad. Hasta que hace una semana volvió a hacerlo. Pero con otra. Un día se fue a esperarla a la salida del trabajo y me fui detrás y le abordé. Ella no había llegado. Se dió cuenta al instante que le había pillado. Me fui a casa y se vino tras mía. Y me dijo que sólo había sido una vez y que fue casual y que había quedado para tomarse un café y cerrar la historia. Y que en mi afán de controladora no le había dejado ni un momento para cerrar el tema. De nuevo, la culpa era mía. Que no le dejaba espacio, que le axfisiaba. Antes que no le echaba cuenta, ahora que estaba muy encima. Siempre yo la culpable. Al día siguiente, después de muchos lloros, horas y horas de discusión y sexo, salimos y nos lo pasamos bien. Pero al levantarnos por la mañana, me dice que quería probar otra vez con ella, para poder decidir y que había tres opciones: seguir conmigo ("esa es mi opción preferida" seguir con ella o quedarse sólo. Y me pide un tiempo para poder decidir. Imaginaros mi reacción. Le dije que no hay tiempo ni nada, que ahora mismo le mandara un mensaje de despedida y qué se acabó. Y delante mía. Se negó. Y me dice que yo con mi actitud estaba engordando y dándole importancia a ese tema, que para él no era tan importante. Le dije que si no era importante cómo me plantea esas opciones. Finalmente, le dije: mira, tú eres incapaz de decidir nada, estuviste un año tonteando con la otra y ahora yo no voy a pasar por lo mismo. Mi vida fue un infierno. Yo nunca he mirado el movil ni he espiado ni soy desconfiada. Y no quiero volver a pasar por eso. Así que le dije que se acababa. Eso fue hace dos días. Ayer me envió un mensaje preguntandome cómo estaba que no constesté. Y también me llamó y no se lo cogí. Estoy destrozada, lo quiero con locura, y se me hace muy cuesta arriba.
Perdónale otra vez y cuando vuelva le aceptas. Y así habrá una tercera y cuarta y quinta vez. Hasta que un día te levantes y te des cuenta de la estupidez de la situación y el tiempo que has perdido con un infiel mentiroso que no te quiere ni te querrá jamás.
Llevo cinco años con mi pareja. Hace dos años, dejó la relación durante dos meses, porque conoció a otra y directamente cortó la relación. Me dijo que nos habíamos alejado y que yo no le echaba cuenta. Pero le insistí y finalmente admitió que había una tercera persona. Yo lo quería mucho y me hundí. Estuve de psicologos pero luché por la relación. Volvimos. Su affaire duró dos meses. Cuando ya estabámos juntos de nuevo, me sentía muy desconfiada. Y comencé a mirarle el movil cuando se duchaba y efectivamente seguía en contacto con ella, prácticamente a diario se enviaban saludos y emoticonos. Esto duró más de un año. Yo se lo reprochaba y teníamos muchas broncas por eso, me volví totalmente desconfiada y controladora. Se me apagó la vitalidad y nuestra relación se convirtió casi en exclusiva sexual. Finalmente, los mensajes cada vez eran menos, hasta que prácticamente desaparecieron. Comencé a sentirme más segura y por fin volvió un poco la tranquilidad. Hasta que hace una semana volvió a hacerlo. Pero con otra. Un día se fue a esperarla a la salida del trabajo y me fui detrás y le abordé. Ella no había llegado. Se dió cuenta al instante que le había pillado. Me fui a casa y se vino tras mía. Y me dijo que sólo había sido una vez y que fue casual y que había quedado para tomarse un café y cerrar la historia. Y que en mi afán de controladora no le había dejado ni un momento para cerrar el tema. De nuevo, la culpa era mía. Que no le dejaba espacio, que le axfisiaba. Antes que no le echaba cuenta, ahora que estaba muy encima. Siempre yo la culpable. Al día siguiente, después de muchos lloros, horas y horas de discusión y sexo, salimos y nos lo pasamos bien. Pero al levantarnos por la mañana, me dice que quería probar otra vez con ella, para poder decidir y que había tres opciones: seguir conmigo ("esa es mi opción preferida" seguir con ella o quedarse sólo. Y me pide un tiempo para poder decidir. Imaginaros mi reacción. Le dije que no hay tiempo ni nada, que ahora mismo le mandara un mensaje de despedida y qué se acabó. Y delante mía. Se negó. Y me dice que yo con mi actitud estaba engordando y dándole importancia a ese tema, que para él no era tan importante. Le dije que si no era importante cómo me plantea esas opciones. Finalmente, le dije: mira, tú eres incapaz de decidir nada, estuviste un año tonteando con la otra y ahora yo no voy a pasar por lo mismo. Mi vida fue un infierno. Yo nunca he mirado el movil ni he espiado ni soy desconfiada. Y no quiero volver a pasar por eso. Así que le dije que se acababa. Eso fue hace dos días. Ayer me envió un mensaje preguntandome cómo estaba que no constesté. Y también me llamó y no se lo cogí. Estoy destrozada, lo quiero con locura, y se me hace muy cuesta arriba.
Te ha engañado dos veces que tú sepas.
Dicho lo cual, obviamente, ese hombre carece del valor moral de la fidelidad y por lo tanto, siempre te será infiel a ti o a otra pareja que pudiera tener porque él es así. Y si vuelves con él los cuernos seguirán y tú lo sabes: no te autoengañes.
Respecto del amor que sientes por él, que tú bien dices es "locura", te diría que ya se ha convertido en una obsesión y en dependencia y por lo tanto es patológico.
Mi consejo es que cortes todo contacto y dejes de sufrir esa agonía. El amor bien entendido comienza por uno mismo y eso significa tener autoestima y dignidad.
Valórate.