Los hombres son más inexpresivos
Las mujeres hablan un número de palabras mucho más superior que el de los hombres y su significado tiende a ser más indirecto y superficial.
Por lo general, se expresan con frases que denotan sentimientos debido a su entonación, gestos de la cara o movimientos corporales. Sin embargo, el hombre es mucho más directo, no necesita todas estas expresiones y se mantendrá igual si transmite algo triste o algo alegre.
Estas diferencias de comunicación generan grandes discusiones en las parejas: el hombre se queja de tener que adivinar el pensamiento debido a las frases poco claras o con doble sentido, mientras que la mujer, por su parte, se quejará de la poca emotividad y de la firmeza sin sentimientos.
Dado el menor número de comunicaciones diarias que mantiene el hombre, muchas mujeres suelen sentirse abandonadas y solas, y opinan que su pareja no les habla, que él se mantiene callado durante largo rato, lo que interpretan que está enfado o algo similar.
Lo que tienen que tener claro estas mujeres es que el hombre es capaz de mantenerse callado en una reunión de amigos durante un periodo de tiempo ilimitado sin que nadie se moleste por ello, siempre y cuando el grupo sea totalmente masculino.
Realmente, ellos están manteniendo un discurso interior consigo mismos, lo cual les diferencia de las mujeres, que suelen hablar siempre hacia el exterior, en voz alta. De hecho, si les molestas, se enfadarán porque les has interrumpido en su razonamiento.
La forma de comunicarse adecuadamente con un hombre es dejarle hablar hasta que termine su exposición, si no lo interpretará como un ataque.
Las mujeres necesitan una respuesta
Las frases que utilizan los hombres son concisas, precisas y tajantes; las de las mujeres son enredadas, indirectas y largas. Las de ellas sirven para fomentar las relaciones y la buena comunicación entre iguales, mientras que las de ellos sirven para solventar problemas, tomar decisiones, cerrar tratos, etc.
Si una mujer quiere aparecer bien delante de un grupo de hombres, tendrá que ser concisa y directa, sino entenderán que es una cabeza loca y no se integrará en el grupo. La forma de comunicarse adecuadamente con un hombre es dejarle hablar hasta que termine su exposición, si no lo interpretará como un ataque y se pondrá a la defensiva. Las mujeres que saben esperar y ser pacientes tienen buena fama y son amigas de los hombres; las que interrumpen todo el tiempo y dan su opinión sin saber, se vuelven inaguantables para ellos.
A menudo, la forma de comunicarse que utilizan las mujeres es con ánimo de ser recompensadas por el hombre. Muchas veces sólo quieren ser escuchadas y ni siquiera buscan una solución a sus problemas, con lo cual, lo mejor que podrá hacer el hombre es callar, asentir activamente y apoyar cuando sea necesario.
La mujer es muy emotiva al hablar y necesita una respuesta del hombre. Ellos, por su parte, son más literales, interpretan las frases al pie de la letra y por eso, se generan muchas discusiones.