Saludos amigos,
Llevo 7 años con mi marido, de los cuales 2 son viviendo juntos. He llegado al punto de no ver nada positivo en él y no siento que me haga una mejor persona. Les comento:
Nos conocimos en la secundaria, después que nos graduamos me empezó a buscar, así fue por 6 años hasta que me convenció, él acababa de terminar una relación "estable" con la mamá de su hijo, actualmente tiene 8 años. Llevábamos una relación muy bonita hasta que él terminó conmigo alegando que no quería compromisos, pues acababa de salir de uno, me llegó por sorpresa, pero lo acepté. Nos seguimos viendo porque tenemos amigos en común, meses después él a veces me visitaba en casa, hasta llegamos a ser amantes, 6 meses después me arme de valor y le dije que si continuaba conmigo tenía que ser en una relación, de lo contrario que me dejara en paz. Estuvo dando vueltas por la casa por horas, a la final se fue a su casa y en la noche de ese mismo día me escribe que acepta mi decisión. Continuamos bien hasta que se me ocurrió revisarle el teléfono y encuentro mensajes sucios de él con otra mujer, lo primero que le vino a la mente cuando le reclamé fue que porque le revisaba el teléfono, terminé con él ese día y estuvo semanas llamando, visitándome y escribiéndome que lo perdonara, que él no se vio nunca con ella, que había sido una estupidez de su parte. Al día siguiente de haber disculpado su imprudencia, estábamos revisando algo en su teléfono y la mujercita le escribió, fue tanta mi decepción y sombro que ni siguiera recuerdo el nombre de la tipa. Llore desconsoladamente, él nuevamente me pidió disculpas y continuamos. Desde ese entonces, él tiene contraseña en su celular y yo en el mío, quedamos en respetar el teléfono de cada uno. Pasó el tiempo y compramos vivienda, hicimos planes de vida juntos y nos juntamos en un mismo espacio. Al principio siempre discutíamos por cualquier necedad, hasta que poco a poco fueron mermando las diferencias. Yo cuando hablaba de él me sentía la mujer más afortunada del mundo, pues compartíamos mucho, había confianza, colaboración mutua, no salía con amigos a embriagarse, y si lo hacía me llevaba. Mi marido estaba sin trabajo cuando empezamos a vivir juntos, duró así por 6 meses, luego decidió irse a otro país a buscar mejoras, yo no estuve de acuerdo, sin embargo decidí esperarlo. El plan era que estuviera afuera por 5 meses y duró 6, también en contra de mi voluntad. Mantuvimos contacto permanentemente, con videosexo y todo. Me sentía la mujer más enamorada del mundo y yo percibía lo mismo en él. A su regreso, noto que no me recibe con tanta emoción, el sexo esa noche fue malísimo. Esas semanas, él no me buscó porque decía que no tenía ganas. Con preocupación, nuevamente esperé a que estuviera listo y continuamos normalmente. Luego, no me apoyaba en las cosas de la casa, no pagaba las cuentas como antes. En mayo de este año, hablo conmigo y me dijo que ya no se sentía atraído por mí, que estaba aburrido de lo mismo y que estaba harto de esta economía. Le pregunté que desde cuando venía pensando eso y me dijo que 2 meses. Yo me quedé asombrada, pensé que la distancia que teníamos era de solucionarse con una conversita y unos besitos. Pero la cosa era más grave. Hable con él y le expliqué que todas las parejas pasan por eso, que había esperado mucho tiempo para hablar. Él lo pensó mejor y continuamos. Ahora yo estoy llena de inseguridad, no me siento feliz ni ganas de tenerlo en mi vida, pero hay algo que me ata. Como dicen, el amor es un ingrato.
Disculpen lo largo, resumí siete años de relación.
