"¿De verdad quieres saberlo?" Te susurro al oido mientras recorro tu cuello con pequeños besos. Se que deseas saberlo, que el morbo que despierta en ti es superior al posible daño que puedas sufrir al conocer como disfrutaba de ellas y ellas de mi...
Otras veces traté de evitarlo pero hoy, por fin, voy a contarte aquello que tanto deseas saber... continúo besando tu cuello observando como se endurecen tus pezones solo de pensar que, de una vez por todas, vas a saber como me hacían gozar...
¿La recuerdas? Era rubia, hermosa, recatada a la vista pero muy sucia en la cama. No me gusta mirar atrás pero tu insistencia me trae recuerdos de ella, de sus pequeños pechos con sus diminutos pezones rosados... Recuerdo como disfrutaba mientras yo los acariciaba con mi lengua mientras mis dedos se empapaban en su flujo... Recuerdo como juntaba las rodillas para que mi mano no escapara de darle placer... Siento tu pulso acelerarse mientras escuchas atenta cada detalle. Te está excitando imaginarme haciéndole a ella lo que ahora mismo te estoy haciendo a ti.
Recuerdo como se corría en mis manos gimiendo, deseando más de mi, pidiendo que la penetrase... pero aún era temprano y ella, al igual que tú ahora, lo sabía. La haría correrse de mil formas, la haría subir a lo más alto y descender a lo más profundo... La haría suplicarme que su sexo pudiera abrazar mi gruesa y dura verga.... Tus bragas empapadas delatan tu placer imaginando mi lengua trazando círculos en su clitoris, su pubis rasurado y su agrio pero dulce jugo... Se que estás disfrutando pero tu pulso acelerado te delata intranquila, nerviosa pensando que alguna vez fui suyo...
Impaciente se volvía hacia mi ... para tomarla entre sus manos y su boca y acompasada, aunque algo tosca, me masturbaba loca por que la dejase cabalgarme pero... era temprano, aún le quedaban muchos orgasmos por descubrir antes de subirse a mi montura... Tu respiración entrecortada revela que sabes bien de lo que te hablo ¿verdad?. Déjame que aparte tus bragas y empape mis dedos de ti mientras te lo cuento...
Me gustaba aquel tanga rojo de encaje delicado. Apartar aquel hilo para humedecer su precioso culo con sus propios jugos para introducirle lentamente un dedo y sentir como, al conjunto de sentir mi lengua en su ... y uno de mis dedos por detrás alcanzaba un orgasmo más.... Dejando de lado tus celos, sientes como la explosión de placer que te acaba de invadir empieza a lubricar tu precioso culo... me miras complice, se que estás deseando sentirte rellena por ambos lados y sabes que lo haré y que te encanta sentirlo asi...
Añadía un segundo dedo que amplificaba sus gemidos.... un tercero desgarrador que la hacía temblar de placer mientras un orgasmo más asomaba en su sexo.... en ese mismo instante le arrancaba el tanga de las piernas para, por fin, dejarla cabalgar sobre mi montura.... ¿Te estás corriendo otra vez? Está bien, disfrúta de mis dos manos dedicadas a ti mientras mi boca te narra los gritos que ella daba al sentir como cada milimetro de mi gruesa ... se abría paso en sus entrañas para luego seguir gritando con cada trote montada sobre mi.... Sus pechos agitándose mientras su ... chorreaba sobre mi ... ... Separa tus piernas, apoya tus pies en mis hombros y prúebala dentro de ti una sóla vez.... ¿Te corres de nuevo? Gime ahora que nadie, salvo tu y yo, escuchamos tu placer
¿Sabes? precisamente eso era lo que ocurría cuando la desmontaba... Bruscamente la tiraba sobre la cama para que me ofreciese de esta forma un apretado sexo en el que meterla para arrancarle un nuevo orgasmo con la.... segunda, la.... tercera, la... cuarta y brutal embestida a la que ya no podía resistirse....
¿Que más quieres saber? Quieres saber como, volteándola para ponerla a 4 patas la embestía desde atrás mientras su enrojecido sexo y su sucia boca pedían más, y más fuerte, y más rápido....
¿Quieres saber como nos corríamos entonces estallando en un brutal orgasmo a la vez? ¿Eso es lo que querías saber? Te digo mientras nos fundimos, temblorosos por el placer, unidos en un fortísimo climax....
Por hoy quizá sea suficiente la charla... abandonémonos al placer y córrete una y otra vez conmigo esta noche.
Recuerda... Otro día seré yo quien pregunte y tendrás que contármelo todo....
