Buenas noches.
Quería compartir algo que me está ocurriendo, y pedir opinión al respecto.
Soy hombre, y me encuentro en una relación con una mujer desde hace un año. La relación desde el principio ha sido satisfactoria para las dos partes, aunque hace algunos meses que mi pareja no es la misma conmigo.
A pesar de que ambos tenemos un trabajo demandante, y no vivimos en la misma ciudad (nos separan 30 km), siempre hemos puesto como prioridad nuestra relación y hemos hecho lo imposible por cuidarla y vernos lo máximo posible.
Desde hace unos meses, parece que por su parte está todo algo más frío. No tiene tantos detalles como antes, y a veces se olvida de cosas que antes recordaba sin problema.
Mis preocupaciones se han agravado hace un par de semanas. Ella me contaba un comentario que le había hecho un compañero de trabajo, y decidio mandarme una fotografía y preguntarme ¿Que te parece? Yo no sabía porque la enviaba ni que esperaba que dijera.
También me contó una tarde, que estaba viendo una película en casa, cuyo argumento era: dos personas dejan a sus parejas y se conocen.
A pesar de todo, la relación continua su curso, y nos vemos casi todos los días, tenemos relaciones casi siempre, y ella es cariñosa conmigo y me dedica palabras de amor.
Estos días se han ido sucediendo detalles, hasta que un día decidi hablar con ella: yo tenía todo muy claro, y quería saber si ella también lo tenía y quería seguir con la relación. A todo me dijo que si, entre lágrimas y abrazos, achacando su distancia conmigo al estres y al cansancio.
Parece que todo se arregla, pero a los pocos días vuelve la apatía, y yo le vuelvo a preguntar si todo está bien, si hay otra persona en su cabeza, aunque ella lo niega rotundamente.
Desde entonces se han ido intercalando días buenos y días sin más. Hoy ha sido uno de estos últimos, y me he vueltoa venir abajo. Además, ha tenido dos detalles que me han hecho daño. En uno, me ha enseñado un vídeo en que su primo pequeño jugaba con un regalo que le hice a ella, tratándolo a patadas, lo cual me ha dejado un poco apenado. He evitado decirle nada al respecto.
Intento mantener la cabeza fria, porque en alguna ocasión por celos he tenido sospechas y en todas ellas todo era algo que estaba en mi cabeza (comprobado por mi).
Al principio, yo achacaba estos cambios de humor a que ella había comenzado a tomar la píldora. A los cambios de humor también se suma que en nuestras relaciones la lubricación ha empeorado un poco, cosa que también puede deberse a la pildora.
Me gustaría que alguien me aconsejara como gestionar este asunto, porque no es una situación que pueda asumir durante más tiempo.
Muchas gracias