Me han dicho que es mejor que no hable. Que a las tias les gusta los que no hablan. Que me ponga un pantalón todo apretado y asi marque el paquete. Si hace falta que me meta una salchicha. Y si me callo y me siento en un taburete enseñando el paquetón, las tias caen. Y si me hablan, que yo no diga nada.