He leido mucho en este foro, y en otros y siempre acababa con la misma conclusión: un hombre nunca dejará a su mujer por la otra. No escribo para que me juzgueis, aún sabiendo que las críticas van a ser muchas, todos somos mayorcitos para saber lo que está bien y lo que está mal, y no pido consejo, únicamente es contar otra versión, o mostrar que a veces las cosas no son como parecen. Resumiendo un poco he de decir que inicié una relación con un hombre casado, yo también lo estoy, y los dos tenemos hijos, sin dar demasiados detalles, nos enamoramos, sin buscarlo. Obviamente todos ponemos siempre la misma excusa, "yo no lo busqué, mi matrimonio estaba mal, bla, bla". Está claro que quién hace una cosa así es porque quiere, y punto, ¿los motivos?, cada cual tiene el suyo, todos respetables. Empezamos a hablar de futuro, y a mi me hacía gracia, porque claro, haciendo caso del "nunca dejará a su mujer por tí", pués le seguía un poco el rollo. LLegó un momento en que yo misma me lo empecé a creer, cada vez estaba más enamorada de él, y él de mi. Decidimos no hablar más de futuro porque si luego no salían bien las cosas sería peor y lo pasaríamos mal. A pesar de todo, yo seguía pensando en una vida con él, y en que a pesar de que sólo llevábamos 3 meses juntos, esta relación algún día debería dar un giro, y o bien seguíamos juntos o bien terminábamos para siempre. Así se lo planteé, le dije que si para verano no empezábamos a tener proyectos razonables, lo dejaría. Yo no sé que es lo que se le pasó por la cabeza, pero la cuestión es que el viernes me llamó que se había ido de casa, está ya en trámites de separación, y lo ha hecho porque no podía más, no quiere perderme y de quién está enamorado es de mi, no quiere seguir mintiéndose.
Claro ha pasado lo que se supone que no puede pasar nunca. Que el hombre a los tres meses decida dar el paso y dejarlo todo por la otra.
Saludos.
