...sean sietemesinos o no.
realmente no tengo mucho que contar, salvo que soy feliz y después de tanto tiempo quebrándome el coco y las pelotas del personal, ¿que menos que hacerlo saber?
Más que nada porque - al menos a mí- alegra cuando alguien consigue superar los baches y llega a buen puerto. En mi caso, sólo necesitaba dejar de luchar por adaptarme a un lugar que no era el mío, coger los bártulos y tirarme al ancho y frío océano, que no veas que canguelo, pero jamás me arrepentí.
No hace tanto ya casi comencé a desesperar, no es fácil comenzar desde cero en otro lugar, pero ha merecido la pena. Aún queda mucho por desabrojar pero puedo decir que veni vidi...y pasito a pasito, vinci.
Merece la pena el salto al agua fría si se sabe lo que se quiere y se lucha, sin lucha no hay nada.
No comeremos perdices ni seremos por siempre felices, que eso ya lo sabemos desde Shrek, pero vivo a mi manera y donde me siento en casa, volví a mis raíces. Ahora apenas paro en casa, siempre a lomos de mi rucio de hierro, como la llaman aquí, conociendo y compartiendo.
Tengo aún más incógnitas que seguridades certeras, pero me voy arrellanando aquí con nueva gente, nueva vivienda, despacio pero firme.
Un abrazo a mis amigos, espero que no me tomeis a mal tanto silencio, tanto tiempo. pasé épocas muy acojonantes, sin ninguna seguridad y no quise jhoder demasiado.
Buen día a tod@s, incluido nonatos foriles y besotes para los amigach@s