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Me sentìa terriblemente atraido por mi cuñada

Última respuesta: 27 de mayo de 2010 a las 20:38
M
monia_6269614
29/3/09 a las 20:33

Estando alojado en la casa de mi hermano un tiempo bastante prolongado, fue que, sin que me diese cuenta y menos adrede, que empezó a gustarme mi cuñada; ella, sin llamar para nada mi atención al comienzo, empezó de pronto hacerme sentir muy a gusto su compañía, y más aun, sintiendo que ella, no trataba de ocultar para nada esa inmensa simpatía que sentía por mi, traducidos en unos sutiles y casi imperceptibles coqueteos que me daba siempre que estábamos juntos.

Una fuerte y bien disimulada atracción surgió de pronto entre nosotros, incontenible comenzó secretamente a expresarse en nuestras furtivas miradas, muy cortas, directas, expresivas; lo suficiente para saber que a través de ellas ambos nos deseábamos con pasión; en cualquier reunión que nos encontrásemos ambos presentes, tratábamos siempre de ubicarnos cerca si no lográbamos llegar estar juntos, para hablar entre los dos de cualquier tontería, cosa que hacíamos complacidos al intuir que de lo que se trataba en realidad era que ambos nos estábamos sutilmente seduciendo.

Siempre rozábamos "casualmente" nuestras manos, a veces también nuestros brazos, era un juego divino y excitante entre los dos, uno donde ninguno de los dos se atrevía a dar el paso que cruzara esa línea que sabíamos estaba prohibida para los dos.

A pesar que ambos teníamos la certeza que quien se atreviese cruzar la frontera, sería correspondido de la misma manera por el otro. Hubieron momentos en que algunas veces ella me propiciaba tentaciones, y otros, era yo quien lo hacía, las especiales circunstancias con que se daban, nos han tenido muchas veces al borde del abismo, de cometer la locura de entregarnos entre cuñados; gracias a Dios, pese al deseo lujurioso que siento por ella, al ser para mi, la mujer que más excitación sexual me produce en todo el mundo, sueño con besar su vagina, sus pezones; también me la imagino follándomela muy morbosamente, imaginariamente la veo excitadísima chupándome el pene, fantaseo también cogiéndomela en todas las poses, y lo peor de todo, es saber que si me atreviese a seducirla ya, se me entregaría de inmediato con secreta complicidad y ..aunque parezca mentira.. justo en este mismísimo instante me la podría estar follando rico a escondidas, que rico es imaginarla desnudita para mi, no saben el tiempo que vengo deseándola, se que ella a mi también... menos mal que hasta hoy ha primado en ambos la cordura y oportuna fuerza de voluntad que me impide serle infiel a mi hermano con su propia mujer, y a ella, serle infiel al marido con su propio hermano; no se, a veces el deseo es tan grande que temo alguna vez suceda algo entre los dos, que nos hagamos el amor de una manera más apasionada y además morbosa, que sólo un pecado así, nos haría sentir... aunque prometamos será la primera y única vez que lo hacemos, hacemos que suceda para después sentirnos arrepentidos de haberlo hecho... sin embargo, luego de algún tiempo del horrible cargo de conciencia, estoy seguro que ambos lo repetiríamos sólo una vez más, después otra y otra y otra hasta convertirnos secretamente en amantes pecadores, pero de esos que viven momentos excitantemente prohibidos.

Como la deseo, menos mal que hasta hoy no se ha consumado todavía la traición, es para mi y para ella un íntimo secreto como inconfesable pecado. No se tal vez haga algún día realidad la fantasía que tengo de cacharme, follarme a mi excitante cuñada.

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A
alex_6065496
21/4/09 a las 23:20

Nassa77514
Hola, estoy pasando por la misma situación, pero soy en este caso la cuñada, leo tus palabras y estoy más que segura que el hermano de mi esposo se identificaria perfectamente con lo que haz escrito, de hecho es exactamente igual todo.

Cuentame por favor que ha pasado entre ustedes, nosotros llevamos seis meses en esto, nunca lo hemos hablado, pues si conversamos podríamos pasar esa línea que describes perfectamente que sería el abismo.

M
monia_6269614
26/4/09 a las 12:38
En respuesta a alex_6065496

Nassa77514
Hola, estoy pasando por la misma situación, pero soy en este caso la cuñada, leo tus palabras y estoy más que segura que el hermano de mi esposo se identificaria perfectamente con lo que haz escrito, de hecho es exactamente igual todo.

Cuentame por favor que ha pasado entre ustedes, nosotros llevamos seis meses en esto, nunca lo hemos hablado, pues si conversamos podríamos pasar esa línea que describes perfectamente que sería el abismo.

Màs detalles del deseo que siento por mi cuñada
Hola Confundida0715, ya veo que no soy el ùnico que està pasando la abrumadora y confusa experiencia que significa desear a tu cuñado como en tu caso o a mi cuñada como en el mìo.

No sabes la cantidad de veces que he imaginado follàndomela rico, lo he imaginado detalladamente como si se tratasen de experiencias vividas con mucho erotismo y realismo, lo hacìa generalmente luego de vivir algunas sutiles y candentes situaciones de disimuladas coqueterìas con ella, sentir que yo le gustaba, que le producìa algùn ertico deseo, que se atrevìa de cuando en cuando a cruzar breves pero intensas miradas conmigo, miradas que no podìan ocultar nuestro mutuo y discreto deseo de besarnos y poseernos, eran esos asolapados instantes de morbosa lujuria y excitacin que sabiamos existìa entre los dos sin que nunca hubièsemos tenido que declaralo, mas que nada por la verguenza que ambos sentiamos de tener que reconocer la existencia de aquellos deseos de traicin y de pecaminosa infidelidad que nos atormentarìa, por lo menos al comienzo, acostarme yo con la mujer de mi hermano y ella con el hermano de su esposo.

Luego de prolongados y disimulados coqueteos, furtivas y expresivas miradas, roces casuales y breves caricias en manos, hombros y pelo tratando de sentir alguna fantasiosa intimidad a travès de estos inocentes y a la vez maliciosos hechos que con frecuencia nos prodigàbamos sin que nadie lo advirtiese, me ponìa a mil, lo que me producìa a la vez esa incontenible y lujuriosa excitacin que me llev infinidad de veces a masturbarme pensando que por fin me la estaba follando rico, deliciosa y morbosamente rico, imaginando escenas de sexo tan detalladamente reales que no tardaba en sentir los orgasmos màs intensos que nunca antes experimentè.

Una vez hubo tuvieron una pequeña reunin en casa, es decir en la casa de mi hermano y de su esposa mi cuñada, yo estuve alojado un buen tiempo con ellos, me brindaron muy gentilmente un dormitorio y alimentacin que compartìa generalmente en la mesa casi todos los dìas con ellos; para tal reunin, mi cuñada que acostumbraba vestir normalmente pantalones, se puso un coqueto y ligero vestido que mostraba casi desnudo a sus femeninos y atractivos hombros, apenas cubiertos por una delgada tirita de tela, yo ya estaba durante toda esa reunin loco de deseos por ella, la miraba con disimulo y deseo, ella me correspondìa con coqueta y discreta complicidad, en una de esas ella entr en la cocina, justo cuando yo me encontraba haciendo alguna de esas tareas que voluntariamente me dignaba hacer, no recuerdo en este momento de cual se trataba, slo vi su perfilada y ertica figura mostrando tentadoramente sus hombros y sus piernas por encima de las rodillas, luego de hablar no se de que tonterìas, ella se retir del ambiente no sin antes agacharse, dàndome la espalda, para recoger algo del piso, y lo que vi me llen de excitacin y de pecaminosos y desbordantes deseos por ella, al agacharse, la falda se le subi por atràs hasta casi el borde de sus nalgas, perdì la razn y la desee como nunca, no me importaba que fuera mi cuñada, tampoco que fuera la mujer de mi hermano, lo ùnico que me importaba era abarzarla, besarla y hacerle el amor a sus piernas, a sus tetas y a su deliciosa vagina hasta alcanzar el inimaginable cielo de placer, que slo lo prohibido, lo pecadoramente prohibido me podrìa producir.

Imaginaba revolcàndome con ella en la cama, imaginaba intensos, erticos y profundos besos entre los dos, imaginaba quitàndole la ropa, chupando sus pezones, retiràndole el calzn y entregàndome al placer de chupar su vagina hasta el cansancio, la imaginaba tambièn a ella chupando mi verga erecta, dura y al palo, imaginaba que haciamos un sesentinueve, que la penetraba en todas las poses existentes, que gemìa con lujurìa y que se soltaba a un intenso y prolongado orgasmo lleno de sexo, lujuria y de morbosa excitacin, imaginando esas erticas y fantasiosas escenas me venìa en una incontenible y poderosa eyaculacin lleno de exquicito y morboso placer , slo de pensar que al fin me habia cachado rico y sin restricciones a mi tentadora y deseada cuñadita.

Creo que el momento en que estuve màs cerca que nunca de lanzarme con ella, fue cuando termin aquella reunin y mi hermano me pidi que llevara a su mujer en el carro hasta la casa de su mamà; a pesar de mi excitacin y de mis deseos por ella, a pesar de mi resolucin de aprovechar si o si aquella oportunidad para abordarla, no me atrevì.. y no se, a pesar de las consecuencias que habrìan podido desatarse con semejante actitud, siento que me arrepiento por no haberme atrevido a hacerlo.

Hasta el dìa de hoy creo que nos seguimos deseando con pasin y lujuria y no soy capaz de garantizar que nunca vaya a suceder algo entre los dos, creo que si ella se atreviese a dar un pasito màs de lo habitual, yo le corresponderìa del mismo modo, con otro paso adicional, uno que nos lleve sin contencin y desenfreno a nuestra primera relacin sexual, no se, no quisiera que ello sucediese nunca, sin embargo a veces el deseo puede màs que nuestra fuerzas y la censura de nuestras conciencias.

Cuèntame Confundida, como ha sido o es esa experiencia que vives con tu cuñado, alguna vez has estado tentada a abordarlo? alguna vez han estado a punto de caer en alguna inevitable tentacin, que clase de sentimientos y de deseos has sentido por èl, quiero saber hasta que punto se parecen nuestras complejas y confusas historias de amor y de deseos prohibidos.

S
sidi_7037992
27/5/10 a las 20:38

Total locura
Lo mio comienza Cuando era novio de la que ahora es mi esposa, mi cuñada tenia 16 años y estabamos y estabamos todos bañandonos en la piscina, cuando mi cuñada se apoyaba en mi espalda para que la llevara a lo mas profundo ya que no sabia nadar, yo soy bastante alto; ella me pedia que la empujara duro hacia arriba pero para saltar fuera del agua y caer mas lejos, pero cuando buscaba para que se agarrara de mi y cuando intente jalarla varias beces mis manos tocaban sos senos y en dos ocaciones toque sus genitales, claro sin querer, desde ese momento ella cambio conmigo, me hablaba muy poco pero no me rechazaba, hablabamos de vez en cuando, compartiamos, pero me parece que sentia pena o mas bien sintio lo mismo que yo senti y descidio mantenerse al margen.

paso el tiempo y una vez que estabamos los tres en la casa de mi novia, estaba yo con mi novia en el juego mas erotico que alla tenido, jugando acariciandonos besandonos por todas partes, y estabamos en plena acción cuando note que mi cuñada nos veia detras de unas escaleras, ya era demaciado tarde para parar así que decidí terminar lo que habiamos empezado, mi novia no se dio cuenta, despues de esa experiancia, a mi cuñada que no le importava salir en pijama o con camisas claras sin sostenes de un momento a otro no se dejaba ver si no estuviese cambiada.

asi pasó el tiempo hasta que me casé, yo soy fotografo, y lo peor paso cuando un dia me pidio que le hiciera unas fotos en traje de baño, mi esposa se encontraba con nosotros, pero ella empeso a decir palabras como comeme papito, quiero que me comas, era tan despacio la forma en que lo decia que yo aduras penas podia escuhar y mi esposa nunca las escucho, y la forma en que me miraba me queria comer.

la ultima vez fue quince dias despues aproximadamente que mi cuñada se fue a mi apartamento a ver peliculas, claro estaba mi esposa tambien, y se quedo dormida mi cuñada, y empese a tocar sus manos con la punta de mis dedos, a acariciar sus manos y veia como cambiava el gesto de su cara como si estuviera despierta y gozara con lo que estaba pasando, apretaba lo dedos de los pies y movia muy suave mente sus caderas, pero siempre se a mantenido al margen y no ha pasado a mayores, pero tengo la dudad si ella me deseas ya que aparenta no sentir absolutamente nada pero en ocaciones su forma de ser me muestra como si se ecxitara solo con verme, porque se pone nerviosa y cambia la forma de ser solo conmigo

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